CAPÍTULO 43: Y... oscuro

Me cuesta reaccionar, creo que no he escuchado bien, pero si, he escuchado bien, su expresión me lo confirma, parpadeo incrédula, no entiendo que me haya dicho eso enserio.

-Anna: estás loco, ¿cómo no voy a ir Dani?

-Dani: fácil, diciendo "no".

Me rio irónica y me revuelvo el pelo, relamo mis labios y le miro.

-Anna: No voy a decir que no, ya puedes quitarte la idea de la cabeza

-Dani: Anda...pero yo si tengo que dejar de tener relación con amigas por ti, ¿no?

-Anna: ¿qué? Estoy flipando... yo no te he prohibido nada, no te confundas eh Dani, no te confundas

-Dani: Que no me confunda dice... Anna por dios, que solo hay que verte la cara para ver cómo te pones celosa perdida cuando hablo con alguna

Tiene razón, y eso que nunca, jamás he sido celosa ni posesiva. Pero con él es diferente, lo siento mío y no soporto que me lo toquen.

-Anna: No, la cara la pongo porque las guarras que tu llamas amigas, lo que buscan es que te metas entre sus muslos.

Me mira con las cejas levantadas.

-Dani: Anda...y ¿qué crees que busca el Luchito ese? Por Dios Anna.

Abro los ojos lo más que puedo.

-Anna: Pero que sabrás tú. Corté con él, ¡a ver cuando te entra el cabeza! Somos amigos, ya está.

Se ríe irónico chulo negando con la cabeza y eso me cabrea aunque a la vez me gusta.

-Dani: Sí, amigos... sobre todo él vaya.

Aprieto los puños tratando de relajarme, cierro los ojos, pero me resulta imposible, los abro y estallo.

-Anna: Sí Dani si, A-M-I-G-O-S, por difícil de creer que te parezca, un chico y una chica pueden ser amigos sin necesidad de follar.

Ahora es él quien trata de controlar su rabia, se frota la cara.

-Dani: Ese tío no quiere der tu amigo Anna, ese quiere metértela.

Me acerco a él enfurecida, más aún por como lo dice como si yo tuviese algo que ver en ello, y le doy una torta sin poder evitarlo.

-Anna: ni se te ocurra jamás faltarme al respeto.

Se lleva la mano a la cara en la parte en la que le he dado. Me mira y sé que le he hecho daño, que he cruzado una línea que no debería y ahora soy plenamente consciente de la gilipollez que he hecho.

-Dani: yo no te he faltado el respeto en ningún momento, repasa la conversación que hemos tenido...te estoy diciendo lo que él quiere hacerte a ti y me das una hostia -coge la chaqueta- la has cagado Anna...

Anda hacia la puerta, la abre y en lugar de salir por ella se da la vuelta, sonríe triste y a mí se me seca la garganta.

-Dani: ¿sabes? Siempre creí que yo no estaba a la altura de ti, que antes o después la cagaría y pensarías "¿qué hago con él pudiendo tener a alguien mucho mejor?" pero...-se señala donde le he dado el bofetón- no he sido yo...y créeme que lo hubiese preferido.

Se me llenan los ojos de lágrimas. La he cagado, he sido una completa gilipollas joder. Me quiero mover pero estoy como petrificada en el suelo.

-Anna: Dani... -se me resquebraja la voz- no te vayas...

-Dani: ¿que no me vaya Anna? ¿Te quedarías tú si te hubiese dado yo a ti una hostia por decir que una de mis ex quiere follarme? 

No, claro que no me quedaría, me muerdo el labio nerviosa perdida y siento que se me escapa el aire, que se me escapa la vida...y es que Dani es mi vida joder, si le pierdo todo deja de tener sentido.

-Anna: Mi amor...deja que te explique, hablemos...mi vida por favor

-Dani: Esto no tiene ninguna explicación que me parezca que valga la pena Anna. Me has dado una hostia diciéndome que ¡¡ te he faltado el respeto!!

Veo que se gira hacia la puerta y noto que con él se lleva mi aire, mi fuerza, que mi corazón se rompe, mi vista se nubla, todo empieza a ir a cámara lenta. Me mareo, me intento mover para agarrarle y que no se vaya, pero el suelo tambalea bajo mis pies, sin saber como de mis labios sale un "Dani" que oigo distorsionado a lo lejos, y de pronto...oscuro.

CAPÍTULO 42: Sombras del pasado

El domingo por la mañana estamos desayunando en la cama teas haber hecho el amor. Me voy poniendo nocilla en la tostada y recuerdo algo.


-Anna: Por cierto...el martes tengo que ir a Barcelona

-Dani: ¿Para?

Sonrío con los repetidos besos que me da en el cuello mientras me habla y yo, encojo el cuello como una imbécil con la piel erizada.

 

-Anna: uhmm -sonrío- para trabajar

-Dani:¿ pero en qué..?


Me da un bocado y yo suelto un grito y me río a carcajadas, lo empujo


-Anna: ¡Para! -aunque no quiero que pare-  tengo que ir para  un especial de tu cara me suena 

Se ríe conmigo hasta que me escucha decir esas cuatro palabras. Se pone algo serio.

 

-Dani: ¿En serio?

-Anna: Sí, con los niños, un especial para Navidad

Se separa y muerde de mala gana su tostada, lo miro sin entender bien qué pasa.

-Anna: Mi amor...¿pasa algo?

-Dani: Nada por dios que va a pasar

Lo dice como enfadado y con ironía, no entiendo nada.

-Dani: ¿Y ya has dicho que sí?

-Anna: Pues claro mi amor... son los niños de la última edición, tengo que estar con Nayra

Se frota la cara y me pongo nerviosa sin entender nada.

-Dani: ¿ con la niña y con tu ex, no?


Me quedo boquiabierta

 

-Anna: ¿qué dices Dani? A Lucho no quiero verle

-Dani: Pero lo vas a ver, y te maquillará, porque claro, ese es su trabajo

Vuelva a morder de mala gana.

-Anna: Dani no puedo creer que me estés diciendo esto... no voy por él ni muchísimo menos

-Dani: Pero lo verás


Dejo ya mi desayuno a un lado y me levanto de la cama poniéndome el camisón.


-Anna: Sí Dani, estará pero me da igual porque yo por él no siento nada de nada...y creo que nunca he estado enamorada de él

-Dani: No me gusta la idea, él irá saco. Quizás se te remueva algo, han sido 2 años
-Anna: Dani por dios no digas tonterías

Me recojo el pelo haciéndome un moño con las manos contando hasta diez antes de contestar, pero nos estamos alterando los dos.

-Anna: pero ¿qué va a removerme Dani? Que nunca he estado enamorada de él. ¿Qué no entiendes?

-Dani: Tú eres de estar con alguien si estás enamorada. Si lo estás de mi que llevamos 8 meses, de él también lo estarías supongo, aunque no lo estuvieras tanto

-Anna: Dani otra vez... No estaba enamorad .de él, ¡no! Quería creer que lo estaba, incluso quería estarlo...pero solo fue una tabla de salvación en una situación de mi vida que lo necesitaba...¿cómo puedo hacer que lo creas?
-Dani: Fácil, no vayas a tu cara me suena

CAPÍTULO 41: Mentiras.

Después del fin de semana en León en casa de los padres de Dani volvemos a la realidad, a estar la semana separados y el fin de semana en su casa o en la mía. Yo aún no les he contado nada a mis padres, llevo un par de semanas sin ir a Mollet diciéndoles que no voy por trabajo. Cada vez me resulta más complicado mentirles, pero me resulta mucho más difícil separarme de Dani... lo cierto es que la semana la llevo bastante  mal, pero pocas veces podemos vernos.

Carmen: ¿Tampoco vienes este fin de semana hija...?

Suspiro sacándome de mis pensamientos.

Anna: No mamá... el fin de semana que viene intentaré ir, de verdad... -me muerdo el labio, odio mentirle y lo peor es que sé la siguiente pregunta-.

Carmen: ¿Por qué?

Cierro los ojos al oír esa misma pregunta y muerdo aún más fuerte mi labio.

Anna: Porque... no... no puedo mamá, tengo cosas en Madrid... -la oigo suspirar al otro lado del teléfono-.

Carmen: Pues a ver si te dan un fin de semana libre porque cariño, te vas a poner mala de tanto trabajar, y ya me contarás de que es el proyecto ese.

Por un momento se me pasa por la cabeza contárselo pero luego creo que mejor no, se merece que se lo diga en persona.

Anna: Te prometo que el próximo fin de semana voy mamá... te quiero. -sonríe, lo sé, la conozco como ella a mí-.

Carmen: Y yo a ti cariño.

Sonrío, los echo de menos, mucho de menos, y también a mis sobrinos... Suena el timbre y una sonrisa se me dibuja sola en la cara sabiendo quien es, cuelgo rápido, dejo el móvil y me arreglo el pelo mirándome en el espejo de la entrada. Aún me pongo nerviosa al saber que viene... abro la puerta y sonrío más al verle tan guapo.

Anna: Hola... -digo con una sonrisa de oreja a oreja que me es imposible ocultar-.

Dani: Hola rubia.

Y me saluda con esa sonrisa... le rodeo el cuello atrayéndolo a mí dándole varios besos seguidos en los labios.

Anna: Por fin... -le doy un beso entreabriendo las bocas, ladeo la cabeza de modo que nuestros labios encajen y saboreo su lengua mientras vamos andando hacia el salón-.

Es él el que, una vez llegamos al salón, hace que caiga en el sofá de espaldas de forma lenta con el encima mía sin despegarse de mis labios. Seguimos los besos entre sonrisas de complicidad y caricias. Lo necesitaba muchísimo...

Dani: ¿Recibes así a todas tus visitas?

Bromea pegado a mis labios mientras sonríe de esa manera que hace que me tiemblen hasta los dientes, me río y vuelvo a besarle.

Anna: Solo a las más importantes.

Dani: O sea que yo soy una visita importante.

Nos reímos levemente sin dejar de besarnos.

Anna: MUY importante diría yo... -sonrío pegada a sus labios-.

Dani: ¿Y qué otras visitas importantes tienes?

Sonrío y le muerdo el labio, lo estiro. Al soltarlo me quedo mirándole. Es entonces cuando sé por qué me he quedado, sé que necesito estar aquí, verme reflejada en sus ojos, besar sus labios, estar en sus brazos... y nunca había sentido esto, le miro seria acariciándole la cara.

Anna: ¿Cómo tú? Ninguna.

CAPÍTULO 40: Vuelta al presente.

Un "Annita" de quien creo que es Alex me vuelve a la realidad, parpadeo como para acostumbrarme de nuevo a donde estoy. En León, con los amigos y amigas de Dani, con su ex Raquel...y como su novia...quien lo hubiese dicho hace dos años. Miro a Dani y por su cara sé que también ha vuelto atrás en el tiempo, a ese momento en el que un "nosotros" era demasiado abstracto para ser real.

-Alex: Anna -me repite- que si te gustó Astorga

-Anna: Fue...-sonrio al recordar que quizá ahí fue el principio de todo- fue uno de los mejores viajes de mi vida

Veo como Dani sonríe satisfecho por mi respuesta y le coge la mano por debajo de la mesa.

-Dani: La verdad es que fue un fin de semana espectacular...

Enlazo nuestras manos y le miro ilusionada, feliz...enamorada.

-Anna: Fue un fin de semana especial por muchas cosas

Dani se vuelve a mí y me da un beso rápido.

-Dani: Solo el primero de muchos nena

-Alex: Bueno bueno como están los tortolitos

-Adri: Dani, tienes una cara de gilipollas que no puedes con ella.

Se ríe y empiezan todos a reírse incluso Dani.

Las bromas suceden en la mesa una tras otra, poco a poco me voy relajando. Lo cierto es que lo chicos son majos y se preocupan por integrarme. Las chicas...las chicas no tanto

-Virginia: Y oye, ¿Annita?

-Anna: Anna -digo cortándola y le sonrío forzada-

-Virginia: Bueno eso, ¿tú crees que Dani te va a poder seguir el ritmo? Lo digo porque creo que a ti no te gustan mucho las fiestas, ¿no?

Resoplo, estan graciosillas. Beso de mi copa de agua para calmarme un poco antes de contestar, la dejo y poniendo una sonrisa bastante artificial le miro.

-Anna: bueno, yo lo hago frenar y él me hace acelerar. Y eso es bueno

-Virginia: Bueno depende de para quien, ¿tú le has preguntado a él que le parece eso?

Voy a contestar aunque no sé bien que decir. Un apretón en mi muslo hace que me gire y miro a Dani.

-Dani: Yo te lo contesto Vir...me parece estupendo. Por gracias a estar con Anna me doy cuenta de lo que pasa a mi alrededor, me doy cuenta de si mi madre tiene mala cara, de que pasar una noche en el sofá con ella puede ser mucho más divertido que salir a beberme dos botellas de ron. Así que sí, me gusta esto, lo necesito y me hace bien

Lo miro cada vez más embelesada, incluso le llega a emocionar pero me contengo las lágrimas al estar donde estamos, sonrío ampliamente cual idiota y le cojo la cara con ambas manos besándolo una y otra vez entreabriendo nuestras bocas.

-Anna: Te quiero -le susurro-

Sonríe pegado a mis labios mientras le acaricio la cara y me besa, y Dios como me besa...

-Alex: Vale ya que te la vas a comer tío

Se ríe separándose de mí y yo rechisto un poco en bajito.

-Dani: Es que no es para menos...

Me rodea los hombros acercándome a él y yo me escondo en su cuello cerrando los ojos mientras lo huelo, me encanta.

-Adrian: Annita que te vas a quedar dormida hija

Se ríen y yo me separo un poco, no es lugar para esto. Las bromas siguen mientras cenamos y al acabar nos levantamos todos pagando.

Dani da una palmada, se frota las manos y pregunta con su espectacular sonrisa

-Dani: bueno, ¿y ahora?

 -Alex: Pues ahora unas copitas, ¿no?

Se ríe y lo achucha.

- Dani: ¿si?

Me mira buscando saber que me apetece, y a mi lo que me apetece es que nos vayamos los dos solos y perder de vista a estas tiparracas...pero en lugar de eso sonrio y encogiéndome de hombros digo.

Anna: Claro, ¿por qué no?

CAPÍTULO 39: Astorga (IV)

Anna: ¿A dónde vamos?

Dani: A mi habitación, no vamos a estar en medio del pasillo.

¡¿A su habitación?! Madre mía... no me queda otro remedio que seguirlo por los pasillos y me doy cuenta que es justo la habitación de arriba de la mía, abre con la tarjeta y me deja paso.

Dani: Y tómate eso ya que lo tendrás helado…

Anna: ¿Eh? -me rasco la nuca- bueno creo que ya no me apetece... -lo dejo en la cómoda y sonrío tímida, le miro a los ojos y lo noto... noto ese tirón que me arrastra a él, esa tensión entre ambos con la que cada día lucho…

Dani: Siéntate, no vas a estar ahí de pie ¿no? O túmbate, tú como en tu habitación.

Me siento al borde de la cama, tensa y nerviosa... me rasco el cuello y los brazos y miro hacia arriba donde está Miki... cada semana salgo corriendo a Mollet, a sus brazos para huír de esto que tanto me asusta y tan poco me conviene... y me refugio en alguien que quiero, me quiere y es lo mejor para mí... pero esta noche algo ha cambiado…

Cuando me quiero dar cuenta Dani se ha quitado los zapatos y se ha recostado a mi lado apoyando la cabeza en el cabecero y me atrae a él apoyándome en su pecho. Suspiro recostándome en el y extrañamente parece que estoy en casa.

Dani: ¿Me vas a contar ahora que te pasa?

En ese momento le contaria mi vida... sintiéndome a salvo, protegida, cuidada... nunca había tenido esa sensación con nadie, pero prefiero no pensarlo más.

Anna: Miki y yo hemos peleado... digamos que él tiene unas necesidades de sexo que yo no tengo…

Se ríe cuando se lo digo pero tampoco me cabrea, es de risa sí.

Dani: vamos que el quería ración pero tu no... pero hija mía, no te enfades por eso, ¿quién no quiere de eso contigo?

Anna: Pues mucha gente... tú por ejemplo, ¿no?

Levanto la cabeza para mirar, mis ojos bajan a sus labios y de nuevo van a sus ojos... ese tirón se hace más fuerte, imparable, inevitable.

Dani: No lo sabes tu bien...

Me susurra de tal manera que me recorre un escalofrío por el cuerpo, cuando subo la mirada veo que el también me miraba los labios y que se acerca a mi cada vez más sin soltarme.

Mi cuerpo empieza a acercase a él, mi mente me grita "para" pero mi corazón le grota a ella "cállate de una vez". Nuestros labios se rozan y un escalofrío recorre todo mi cuerpo dejando la piel erizada, noto un calor en el vértice de mis muslos desconocido para mí. Nuestros labios se presionan hasta que las bocas se entreabren y se acarician. Mete su lengua en mi boca y la mía automáticamente empieza a jugar con la de él mientras nuestras bocas encajan a la perfección, me pone la mano en mi cintura apretándome a él y yo llevo una de mis manos a su cara acariciándola.

Automáticamente nuestras piernas se enredan, como si nuestros cuerpos de por sí se moviesen para encajar, como si se complementasen, como si fuesen dos partes de un todo...

Enredo mis dedos en su pelo, sus manos bajan a mi trasero, lo aprieta y yo... gimo en su boca como nunca antes me había pasado, me muevo colocándome encima, Dani se se posiciona debajo y sigue  acariciándome, noto su erección creciendo contra mí.

Anna: Dani... -gimo en su boca sin poder parar mientras le revuelvo el pelo-

Cuando pasan varios minutos me separo un poco consciente de lo que acaba de pasar, voy a hablar pero me corta.

Dani: Shh sólo son besos calla…

Me vuelve a atraer a él, y yo, como si de una droga se tratase vuelvo a jugar con su lengua.

Acabo de describir que Dani es una droga y yo me declaro adicta... como besa, como acaricia, lo que siento, lo que noto... Dios nunca había estado así con nadie, he perdido el control... voy cuesta abajo y sin frenos directa a donde me quiera llevar.

Mi pantalón del pijama ya es como si fueran un culot porque no puede estar más arriba con sus caricias y su camisa deja ver su ombligo y parte de su abdomen por mis caricias.

Pasa a mi cuello sin dejar de acariciarnos ambos y ya ahí es cuando me mata del todo, doblo un poco la cabeza para que tenga más accesibilidad y suspiro de placer.

Nos deshacemos de la ropa quedándonos en ropa interior, solo besos pero necesitamos sentirnos piel con piel, a pesar de que he perdido el control, de que nunca me coloco arriba, de que no es mi pareja... me siento más segura, cómoda y en casa que nunca... congelaría el tiempo aquí y ahora, pero el.m tiempo no se congela... mi teléfono suena, nos giramos los dos para silenciarlo pero "Miki" se lee claramente en la pantalla.

Dani chasquea la lengua contra el paladar quitándome las manos y muy a mi pesar lo cojo quitándome de encima rápidamente y cogiendo mi pijama poniéndomelo.

Anna: Ya voy -digo nada más descolgar-.

CAPÍTULO 38: Astorga (III).

Me toco inútilmente el pelo como si así lo fuese a arreglar, carraspeo y miro hacia otro lado.

Anna: ¿Llegáis ahora? Bien... yo esto... me voy a dormir.

Romina: ¡Cuqui! ¿Pero que haces aquí en pijama?

Se ríe y yo hago como que también.

Anna: Nada, he venido a por un café y subo -digo yendo a la barra rápidamente como si así se pudieran fijar menos en mí-

Romina: ¿Pero un café para dormir? ¿O es que vas a darle marcha a Miki?

Anna: A dormir Romina, voy a dormir... estoy agotada.

Dani: ¡La abuela esta on fire Romi!

Se ríe pero veo como me recorre con su mirada mis piernas desnudas y de ahí para arriba.

Anna: Eres un gilipollas -digo enfadada como estoy y pido el café-

Dani: ¡Anna!

Cojo el café y sin mirarle ando rápido hacia el ascensor, llamo insitente al botón para que llegue aunque realmete no tengo ganas de meterme en la habitación con Miki... de reojo veo que Dani se acerca, por suerte se abre el ascensor y me meto dentro...

Maldigo a quien esté ahí arriba cuando entra por la raja que quedaba para cerrarse del todo, pongo los ojos en blancos y le doy varias veces a mi planta como si así subiese antes. Miro hacia arriba mientras mentalmente deseo que el ascensor suba rápido, muy rápido.

Dani: Anna...

Anna: Te has dejado a Romima sola, corre antes de que te la quite otro.

Dani: ¿Pero se puede saber que te pasa? Deja ya el temita. Lo siento si estuve esta mañana tan borde.

Anna: A mí no me pasa nada, sólo estoy cansada.

Dani: Si te pasa Anna... soy yo, Dani, a mí no puedes mentirme... si estuvieses bien no estarías aquí, en pijama, con un café y Miki ahí arriba…

Anna: Me apetecía un café Dani, sabes lo que me gustan, ya está... -miento- ¿a qué planta vas? No le has dado…

Dani: ¿A qué planta vas tú? Porque no vas a tu habitación y yo no pienso dejarte sola…

Anna: Dani voy a mi habitación... no voy a estar sola… -me muerdo el labio, me conoce tan bien y me cuida tanto...-

Veo como pulsa una planta más arriba, la séptima, que supongo que es la suya y no me deja salir cuando se abren en mi planta.

Anna: ¿Qué haces? ¡Que esa era mi planta, Dani!

Dani: Te he dicho que ibamos al mismo sitio.

Anna: Y yo te he dicho que me iba a dormir, que estoy agotada...

Dani: ¿Y ahora es cuando pretendes que te crea no? 

Me sonríe de medio lado y no puedo evitar callarme porque no se que más decirle para que me "crea".

El ascensor se abre en la séptima planta y tenemos que movernos… dudo que mis piernas dejen de temblar, pero por suerte me mantienen en pie para seguirle.

CAPÍTULO 37: Astorga (Parte II).

 Flo: Por fin Annita, te estábamos esperando, venga vamos.

Me doy la vuelta dejando a Dani allí y pasamos la mañana ensayando lo de mañana hasta la hora de la comida que volvemos al hotel y allí está Miki.

Le doy un beso y me siento a su lado, aunque intento bromear la verdad es que de lo único que estoy pendiente es de como tontean Dani y Romina... no sé decir por qué pero estoy verde de celos... y eso que nunca había sentido celos por nadie, mucho menos debería sentirlos por Dani. Cuando veo la cámara del programa que va a grabarnos algunas escenas durante el viaje en la vida "cotidiana" hago como que no pasa nada, incluso dejo que Miki me de comida con su tenedor aunque eso no quita que no pueda mirar a Dani de vez en cuando.

Nada más terminar de comer digo que estoy revuelta y me subo a la habitación, cuando entra Miki me hago la dormida. Una vez acabamos con el show vamos a cenar y tomar unas copas, ver como Romina se roza en Dani bailando y cómo él "se deja querer" me cabrea. No puedo más con esto, o me voy o me voy a volver loca.

Anna: Miki cariño... estoy cansada y mañana va a ser un día largo... ¿nos vamos? O me voy y tu te quedas un rato si quieres…

Miki: No Annita si tú te vas yo me voy cariño... -cojo su bolso para irnos-

Anna: Pero quédate... -quiero estar sola-

Miki: Pero yo he venido a estar contigo cielo...

Le sonrío forzada y me pongo el bolso, me despido de Flo y de Meri.

Al llegar a la habitación finjo un bostezo.

Anna: Que bien voy a coger la cama hoy, estoy molida.

Miki: ¿Ya? 

Me sonríe y veo como viene a mi lado de la cama una vez me he puesto el pijama y me he tumbado.

Anna: Sí... -digo sabiendo lo que viene buscando- me lavo los dientes y a dormir.

Miki: A dormir no cielo...a  mimarnos un poquito ¿no? 

Me hace a un lado el pelo, me besa el hombro mientras desliza el dorso de su mano por mi brazo.

Otros días hubiera agradecido esto, y mucho, pero hoy no, hoy no me puedo quitar de la cabeza a los otros dos.

Anna: Miki... de verdad que hoy estoy agotada... -digo separándome un poco-

 Miki: Joder Anna, no nos vemos nunca, me vengo el fin de semana para estar juntos y te pasas el día como ida...

¿a qué vengo entoces? Dime.

Anna: Sí que nos vemos Miki, nos vemos todos los fines de semana mi amor... -digo algo más dulce para que no se cabree y no note como estoy- sólo que estoy muerta te lo juro, te prometo que mañana sí… -le doy un beso-

Se separa de mí, parece que no estoy tan dulce como creía...

Miki: Anna una relación de fin de semana, y ni eso... llegas viernes, estamos con tu familia, sábado con tus amigos y el domingo me rehuyes a veces como hoy... ¿es eso una relación?

Anna: Los sábados por la mañana y parte de la tarde si estamos juntos Miki y sí que hacemos cosas normalmente…

Miki: Ah que a ti una vez a la semana te parece bien ¿no? Y a veces ni eso.

Anna: Miki es que yo no necesito más.

Miki: Pues yo sí, la pareja se trata de complacerla una a la otra Anna, igual que yo te respeto cuando no quieres más o no tienes ganas tú deberías de darme a veces más si tengo ganas.

Anna: Ah y quieres que haga algo que no me apetece, ¿en serio? -resoplo y me levanto de la cama cabreada-

Miki: ¡¡Pero si nunca te mueves!! Te tumbas, yo arriba y te dejas hacer... siempre lo mismo Anna.

Anna: Ah perdona por no ser una estrella del porno ¿sabes?

Miki: ¡Una estrella de por no! No te estoy diciendo eso, sólo que te muevas a veces, !que hagamos otras cosas Anna!

Anna: ufffffff -resoplo con rabia- mira me voy a por un café abajo -digo levantándome y poniéndome las chanclas, me echo el pantalón corto del pijama un poco más para abajo-

Salgo de la habitación dando un portazo antes de decirle que si se preocupase porque yo disfrutase más quizá me apetecería más menudo... hago un corte de mangas a la puerta de la habitación y llamo al ascensor. Al ver que no viene le doy repetidamente al botón y gruño cabreada, cuando llega me meto en él y le doy al piso de la cafetería.

Se abren las puertas y salgo mirando al suelo pensando en lo de Miki y en por qué estoy así por Dani. Escucho como se ríen a lo lejos, o eso pienso yo sumida en mis pensamientos y me choco... con él tiene que ser joder, encima con Romina, y yo en pijama.