CAPITULO 27 : ¿Cómo sabes que me amas?

Nunca creí que el sonido del timbre pudiese acelerar tanto mi pulso. Por una parte deseo que sea él quién está al otro lado de la puerta, por otra no deseo verle. Me hizo daño ella, pero más daño me hizo él… siento celos, me siento insegura y eso es algo que jamás había sentido, me asusta.

Tras varios segundos con la vista perdida y pensando que hacer, me levanto con inseguridad y tras ponerme las zapatillas voy a la puerta y miro por la mirilla. Me apoyo en la puerta poniéndome la mano en la frente, resoplo y me vuelvo al sofá sin abrir.

El timbre insiste, una y otra vez, cada vez más insistente… no sé quién le habrá abierto la portería pero aquí está… ahora golpes en la puerta acompañan el ruido del timbre. No quiero abrir, no sé que decirle.

Dani: Anna sé que estás ahí, ábreme…

No le contesto cambiando de canal como si estuviese buscando algo.

Dani: Anna va, no seamos críos…

Es que no le pienso contestar vaya, el decía anoche que me gustaba que se arrastrasen por mí, ¿no? Pues ya está.

Ya no llama al timbre, ahora aporrea la puerta.

Dani: Anna maldita sea…abre la puerta, ábrela.

Resoplo y aprieto más fuerte los botones del mando a distancia, se estará enterando toda la finca. En un momento cesan los golpes y temo que se haya ido, me acerco de puntillas a la puerta aguantando la respiración. Miro de nuevo y no lo veo, no puede ser… no quiero que se vaya…

Dani: Hasta que no me abras me pienso quedar aquí sentado.

Lo escucho justo debajo de mis pies, está sentado apoyado en mi puerta y por eso no lo veo…¿será posible?. Vuelvo a respirar, sigue ahí, no lo he perdido.

Apoyo mi espalda en la puerta y me deslizo hacia el suelo con un suspiro de alivio. Espalda con espalda, separados por una puerta e incomprensiblemente, le siento.

Dani: Anna joder… ¿no me vas a escuchar? ¿se quedan las cosas así?.

No sé si es que siente que estoy detrás suya, pero eso es lo que yo siento y sin saber por qué me siento bien, más calmada…

Dani: Pues nada… si no piensas contestar…

Escucho como se levanta, no, no puede ser… no se puede ir, no así… como una imbécil me levanto abrazándome a la puerta, lo veo alejarse por la mirilla, y por una razón que desconozco no abro y no corro tras él. Lo veo adentrarse en el ascensor y vuelvo a deslizarme por la puerta, lloro, se va…

No sé cuánto pasa desde que se va pero sigo en el mismo sitio, en la misma postura y llorando cuando escucho algo detrás de mí, en el descansillo, ¿el ascensor? ¿y pasos hacia mi puerta? Noto como se sientan detrás mía y a los pocos minutos como si arrancasen una hoja de papel.

Y sé qué va a hacer, sé que va a echar una nota, miro ansiosa la rendija de la puerta, a los segundos que a mí me parecen minutos eternos, un trozo de papel aparece a mi lado de la puerta.

Dani: “Quizá no me quieras oír, pero estas al lado de la puerta y me vas a leer… lo sé”.

Suspiro mirando la hoja y mirándola aunque no la cojo y por alguna extraña razón mis piernas hacen que me levante, que busque un boli y me vuelva al sitio para escribir.

Anna: “¿ Y quién te dice a ti eso?” – Se la echo por debajo de la puerta al igual que él-.

Dani: “ Por lo pronto ya has leído la primera… y es más, la has contestado”.

Sonrío al leer su nota de vuelta, el muy capullo me conoce muy bien, tengo tentaciones de dejarlo ahí, no contestar, pero mientras em estoy decidiendo, veo otro papel.

Dani: “No me seas cabezota y dejes de contestarme ahora… Annita… tenemos que hablar y lo sabes”.

Anna: “Creía que no eras de los que se arrastran…”.

Noto como suspira y a los pocos segundos vuelvo a recibir otra nota.

Dani: “Lo siento, ahí me pasé, lo reconozco… pero tú también te pasaste…”.

Tiene razón, yo también me pasé, además una parte de mí pretendía que se arrastrase.

Anna: Lo sé… y lo siento, pero no era yo… eran mis celo…”.

Seguramente esto cara a cara no lo admitiría… arranco la nota y la echo por la puerta, su respuesta es casi inmediata.

Dani: “Es solo una amiga… sólo estás tú”:

Me hace sonreír con eso último pero no, me molestó y las cosas no son así...

Anna: "Haz memoria y recuerda que yo también era sólo una amiga..."

Vuelvo a enviarle la nota, parecemos adolescentes pero quizás a la cara esto hubiera sido peor.

Dani: "Tú nunca fuiste solo una amiga Anna..."

Sonrío de nuevo, me camela enseguida, pero es algo que no puedo evitar, Dani es ese huracán que llega y desordena mis ideas de repente, como quiere, a su antojo.

Anna: "Aunque fume, y sea celosa... ¿me quieres?

Recibo inmediatamente otra hoja a mi lado pero esta vez el mensaje que sólo tienen tres palabras ocupa toda la página, sonrío como una idiota.

Dani: "NO, TE AMO"

Me apresuro a escribir rápido, de estar enfadada y no querer verle me ha puesto de lo más ñoña.

Anna: "Y... ¿cómo sabes que me amas?"

Escucho como se ríe levemente sabiendo que ya me tiene camelada y ñoña perdida y espero ansiosa su respuesta, pero tarda mucho y mi impaciencia aumenta.

Dani: "Si me tocas, el corazón se me acelera. Si me hablas, me sacas una sonrisa. Si suena el móvil, voy corriendo a ver si eres tú. Porque me despierto cada mañana con ganas de acostarme de nuevo para volver a soñar contigo. Porque si me besas, me haces alcanzar el cielo. Porque apareciste de repente y, poco a poco, te convertiste en mi vida. Por eso sé que te amo."

A medida que leo más lágrimas caen de mis ojos, me levanto no estando muy segura de que mis temblorosas piernas me soporten. Abro y lo veo de pie frente a mí, con su sonrisa, esa que me mata y abre los brazos.

Dani: Necesito abrazarte ya.... no me tortures más ni niña...

Sin pensarlo dos veces con mis lágrimas recorriendo mis mejillas ahora por felicidad y la última hoja en mi mano lo abrazo fuerte rodeándole el cuerpo y escondiéndome en su pecho.

Anna: Perdóname por lo de anoche... no quise decir nada de lo que dije, era la rabia y los celos...

Noto como me eleva, levantándome del suelo y haciéndome entrar en casa, cierra la puerta con el pie, me coge la cara con las manos y con los  pulgares me limpia las lágrimas.

Dani: Te amo con rabia, con celos, con la cara llena de lágrimas, fumando, cuando sonríes, cuando me abrazas y me besas... te amo siempre pequeña... pero odio que no me abras la puerta...

Sonrío terminandome de limpiar las lágrimas mientras lo miro.

Anna: Lo siento pero no sabía que decirte si te abría... pero, ¿cómo sabías que estaba aquí?

Dani: Porque te siento mi amor... porque mi cuerpo nota cuando estás, porque somos dos mitades de un todo...

Pega su frente a la mía, yo sonrío rozando las narices y cogiendo su cara con mis manos hago puntillas para besar sus labios, al ver mis intenciones sonríe.

Dani: Bésame ya porque no sabes la noche que he pasado por no darte un último beso antes de que te fueras...

Sonrío por lo que dice, termino de recorrer los cm que quedan y con una mano en su mejilla y la otra en su nuca acariandole lo beso suavemente.

Nos perdemos en ese beso lleno de sentimientos, de emciones, de palabras no dichas y que ya no hace falta decir, nos saboreamos, sonreímos entre besos sabiendo lo que viene ahora.

Dani nos mueve, llevándonos al sofá, y aunque a alguien puede parecerle un lugar poco romántico a mi no... porque cualquier lugar junto a mi amor es perfecto para fundirnos en uno.

El salón el cual hace unas horas estaba lleno de lágrimas y de tristeza por mi parte ahora se inunda de amor, de besos, de caricias, de palabras bonitas que describen lo que nos amamos el uno al otro, y de pasión, de deseo...

Su aroma  en mi piel, mis huellas en la suya,... suspiro, jadeos y gemidos sonnuestra  banda sonora. Perdidos en el otro, unidos, convertido en uno. Nuestras manos unidas arriba de mi cabeza, una última embestida, se aprietan y nuestros cuerpos se relajan, respiraciones agitadas, sus labios en mi frente sudada.

Dani: Te amo...

Anna: ¿Cómo lo sabes?

Sonríe y yo tambien, apoya su frente y la mía tras besarne la punta de la nariz.

Dani: Porque el mundo gira a nuestro alrededor.

CAPÍTULO 26: Tabaco que hiere.

Me tocan el hombro y me vuelvo con el cigarro en la mano derecha.

Dani: Sigues fumando... no cambias ni para eso eh -me sonríe- sabes que nunca me ha gustado.

Le doy otra calada, me acerco a su cara y le echo el humo en los labios que asciende hacia arriba evaporándose.

Se separa, no es la reaccion que esperaba, ni mucho menos....me quedo petrificada.

Dani: No me tires el humo Anna...sabes que odio el tabaco, no lo soporto... ¿y me tiras el humo?

Anna: Uish perdone al señorito, que tiquismiquis la Virgen... -digo también molesta- ¿qué te pasa? -le pregunto borde apoyando mi codo derecho con el cigarro en la mano en mi brazo izquierdo-

Dani: Nada, que mi novia sabiendo que odio el tabaco no solo fuma sino que encima con toda la chulería del mundo me echa el humo a la cara cuando vengo como un calzonazos a ver por qué me dice que va al baño y se sale fuera.

Sonrío ahora como una tonta por eso último y me acerco a él de nuevo rodeándole el cuello sin tirar el cigarro, pero me vuelve a separar serio.

Dani: Anna no estoy de broma, te estoy diciendo que no me gusta que fumes.

Anna: Dani yo fumo y lo sabes, es algo de mi... ¿te digo yo que no bebas por ejemplo?

Dani: No es lo mismo Anna, eso daña tu salud.

Anna: Ah claro perdona, qur el alcohol es algo super sano… -ironizo-

Dani: Mira Anna... solo te digo que a mi no me beses si acabas de fumar.

Anna: Ah, pues muy bien -digo flipando por la situación y por como está- pues por esa regla de tres, tú no me beses cuando bebas, ¿te parece bien?

Me parece increíble que me esté diciendo todo esto cuando el sabe desde hace años que fumo.

Dani: Pues si te molesta el olor a alcohol no te besaré cuando beba... la diferencia es que yo bebo un poco el fin de semana, tu fumas cada día.

Doy una honda calada al cigarro, echo el aire hacia arriba, doy otra, echo el cigarro al suelo y mientras lo apago con el pie echo el aire.

Anna: ¿Sabes qué? Que si tanto te molesto mejor me voy, ¿no?

Dani: No, me voy yo para dentro, fúmate los cigarros que quieras Anna, cuando te apetezca dejar de fumar y venir conmigo estoy dentro.

Se mete de nuevo dentro del local y resoplo llena de impotencia, esto y el cabreo que tengo encima por lo de antes hace que no me pueda tranquilizar de otra forma que no sea fumando. Saco otro cigarrillo de mi bolso y lo enciendo.

No es justo que se ponga así, él ya sabía que yo fumaba antes de empezar a estar juntos, no entiendo nada... los ojos se me llenan de lágrimas mientras fumo, no sé si irme o si volver a entrar... la cabeza me va a mil...

Doy tres caladas más seguidas al cigarro con ansias de que se acabe y lo tiro de nuevo al suelo, lo apago con el pie y entro de nuevo tras darle unas cuantas vueltas más a mi cabeza.

Veo a Dani de lejos con sus amigos y me acerco a él.

Anna: Dani yo me voy, ni estoy bien, ni quiero discutir más y estoy cansada -digo cogiendo mis cosas-.

Dani: ¿Y ahora se supone que yo tengo que salir corriendo detrás de ti, no?

Anna ¿Cómo?-No me creo que me diga eso-.

Dani: Que así funciona lo nuestro... tú haces lo que te da la gana, y yo tengo que ser comprensivo, ceder e ir tras de tí suplicándote.

Anna: ¿Perdona? pero ¿qué dices Dani?- Digo más cabreada y amontonándose las lágrimas en mis ojos- Sólo te estoy diciendo que me voy a mi casa, que no quiero estar más aquí.

Dani: Y también lo dices para que vaya detrás de ti y te pia perdón por lo de antes.

Anna: No me puedo creer que me estés diciendo esto...-Trago saliva para aguantar más las lágrimas- Yo no soy como tus "amiguitas" yo tengo dignidad y ni me arrastro por nadie ni quiero que se arrastren por mí.

Ahora es él quién me mira compungido, le acabo de dar donde más le duele,

Dani: ¿"Amiguitas" Anna? Claro que no eres una de mis amigas, Anna AMIGAS, no me eches en cara mi pasao porque yo podría hacer lo mismo, y la diferencia es que mi pasado no te afecta a ti y el tuyo a mí sí... ya me queda claro que tú no te arrastras por nadie, pero permíteme que dude el que no quieras que yo me arrastre por ti.

Lo miro, nuestros ojos sueltas chispas, si alargamos esto vamos a decir cosasque mañana nos arrepentiremos.

Anna: Será mejor que hablemos cuando nos calmemos Dani.

Dani Pues nada, vete y huye como siempre de los problemas que tienes Anna...

Las lágrimas comienzan a caer por mis mejillas, me las seco rápidamente con mis manos intentando que no me vea y en vez de contestarle, porque sé que la cosa iría a peor, me alejo y salgo del local. Me subo al primer taxi que pasa, por un momento creí que iba a salir tras de mí, pero eso no ha pasado... yo me voy para mi casa y Dani se queda rodeado de sus amigos, de fiesta y... yo lo he plantado...


Nada más llegar a mi casa me quito la falda y la blusa dejándola tirada por la habitación, me pongo el pijama y sin desmaquillarme porque no me queda fuerzas ni para eso, me meto en la cama llorando. Pienso en llamarle, en disculparme de alguna forma pero no sé de qué tengo que pedir perdón... yo soy así y él... también és como és... ¿ y si no somos compatibles?

Este pensamiento hace que llore más escondiéndome en la almohada, empapándola de mis lágrimas y poco a poco me voy quedando dormida por el cansanciode llorar.

A la mañna siguiente me levanto tarde, me miro al espejo, tengo un careto que para qué.. el rímel corrigo, el maquillaje quitado dejando el recorrido de mis lágrimas, despeinada... Miro el móvil desenado notícias suyas, pero solo hay silencio, nada más, y duele...duele mucho.

Ni un simple mensaje, nada... lágrimas vuelven a caer por mis mejillas, ¿ y si me pasé anoche yéndome así?pero tampoco quería quedarme allí y discutir... quizás tenga razón, huí en lugar de hablar las cosas, me fuí de allí y en el fondo esperaba que me siguiese, estoy acostumbrada a que mis parejas me vengan detrás, pero él no es como los demás... él es Dani.



Durante el día me llaman varías veces al móvil y voy a él como loca pero rápidamente veo que ninguna de las veces es Dani y dejo el móvil sonar hasta que se corta la llamada. Odio estar así... puede que él esté esperando a que sea yo quien le llame, pero... ¿lo hago?

Creo que los dos somos demasiado orgullosos por lo que me decido a llamarle, pero cuando estoy a punto de darle al botón verde, suena el timbre...

CAPÍTULO 25: Miradas que muestran lo que palabras callan.

Tercer vestido que me pruebo, hoy he quedado con Dani, me va a presentar a sus amigos despues de dos semanas juntos...salimos de fiesta con ellos y, para que negarlo, estoy algo nerviosa.

Al final opto por una falda negra y una blusa blanca, me recojo el pelo en una cola, me maquillo y me pongo los tacones. Miro la hora, primera vez que me sobra algo de tiempo.

A los 10 minutos llaman al timbre y sabiendo que es Dani le digo que bajo y tras coger mi bolso eso hago.

Según va bajando el ascensor me estoy poniendo más nerviosa, empiezo a creer que no es muy buena idea...abro el portal y ahí está, con su vaquero oscuro, sus converses, su camisa y esa sonrisa que me mata. Me mira de arriba abajo, aún sonríe más, me rodea por la cintura con su brazo y me besa.

Dani: Pero que preciosa estás... -Me sonríe y yo inmediatamente me sonrojo y lo beso de nuevo sonriendo-.

Anna: Tu también estás muy guapo... -sonrío mirándolo-.

Subimos a su coche, arranca y pone música, no me atrevo ni a preguntar cuanto son...ni si habra amigos y amigas. La mano de Dani en mis muslos me saca de mis pensamientos.

Dani: Veo que no has cogido ropa para mañana.

Anna: Ah, ¿que tenía que coger?

Dani: Hombre, pensaba que te ibas a quedar en mi casa... por eso tampoco te he dicho nada...

Anna: No lo sabía...como no me has dicho nada... -dlDigo sintiéndome  un poco avergonzada y tonta, él sonríe y me aprieta el muslo-

Dani: Nena...siempre que salgamos dormirás en mi casa.

Sonrío como una estúpida, me acerco mientras pongo mi mano en su nuca acariciando sus pequeños pelitos y lo beso de una forma dulce y tierna.

Anna: No sabes lo que me gusta oír eso... Digo a escasos milímetros de sus labios-.

Sonríe, coge con sus dientes mi labio inferior, lo estira y me besa entreabriendo nuestras bocas.

Dani: A mí me gusta que estes nena...¿sabes? Duermo mejor cuando te abrazo mi niña...-Se separa tras decirme eso y arranca-.

Me muerdo el labio, me tiene tonta perdida...

Anna: A veces pienso que no debería de dormir tanto contigo... -veo que me mira entre extrañado y asuntado- si... porque me estoy acostumbrando a dormir entre tus brazos y luego me cuesta mucho dormir sola...

Veo como sonríe Mientras aparca con tan solo dos maniobras, hasta eso lo hace bien.

Dani: A mi también me cuesta dormir sin ti mi amor...aguanto hasta que se va tu olor de las sabanas, luego necesito que vuelvas de nuevo a mi cama.

Anna: O dejas de ser tan perfecto y de decirme esas cosas o nos volvemos para casa eh... -Me río quitándome el cinturón y nos bajamos-.

Se ríe y me coge de la mano andamos un poco hacia el bar, nota que mr pongo nerviosa y me aprieta la mano.

Me presenta a todos y todas...me gusta que lo haga como " mi novia Anna" igual son sensaciones mías pero creo que las chicas me van a poner difícil eso de integrarme.

Los chicos inmediatamente me saludan y me dan un par de besos, como a algunos ya los conozco me siento algo más relajada.

Vamos a la mesa que habíamos reservado y me siento al lado de Dani algo cohibida. Me rodea los hombros achuchandome y me atrae a él besandomee en la.sien.

Anna: No vas a dejarme sola en toda la noche, ¿verdad...?

Dani: Ni loco mi vida... -Veo como sonríe y me da un beso en los labios- No te preocupes ¿vale? Ya verás que buena noche.

Anna: Estoy un poco nerviosa...no sabía que erais tantos...

Dani: Es que conocer a Anna Simon crea espectacion.

Senríe y vuelve a darme otro beso, yo no me atrevo a decirle que estoy incómoda con sus amigas.

Lorena: Bueno... por fin conozco en persona a la famosa Anna Simon, aunque vamos... que quien no te conozca... estás en todos lados chica...

Trago saliva, veo como me sonríe pero forzadamente, Lorena Castell... si no recuerdo mal Dani tuvo algo con ella en verano de OM...

No entiendo que sea amigo de chicas con las que ha tenido algo, pero parece que es algo que le encanta...le sonrio también forzada.

Anna: tú eres Lorena, no? Dani me ha hablado mucho de ti.

Lorena: Para bien seguro

Sonríe mirando a Dani y le guiña el ojo, noto como él está algo incómodo ahora mismo.

Coloco mi mano en la pierna de Dani y veo que me sonrie, le devuelvo la sonrisa.

Anna: Dani siempre habla bien de sus amigos y amigas.
Lorena: Hombre, de algunos mejores que de otros eh...

Miro a Dani, si no fuera por él ha le hubiera soltado una bordería.

Dani: No entres al trapo Anna... -me susurra- Pasa de ella mi amor, por favor... -me da un beso-.

Anna: Me está vacilando delante de todos solo porque se ha acostado contigo Dani...

Dani: Tú lo has dicho, porque se ha acostado conmigo, sólo por eso, tú sin embargo eres mi novia, no te acuestas conmigo si no que haces el amor conmigo y la mayor diferencia de todas, que a ti te amo.

Sonrío como una tonta y no puedo hacer otra cosa que besarle con suavidad demostrándole que yo también le amo.

Lorena: Ya sabemos qur a Dani le encanta besar pero...estamos aqui todos y deberianos empezar a pedir.

Me separo resoplando y el echo una mirada fugaz, me tiene harta y la noche sólo ha hecho empezar...

Anna: Sí, venga, vamos a pedir porque la noche es larga... -Digo mirando la carta-.

Dani pasa un brazo por mis hombros, me empieza a dar besos en la mejilla y mira mi misma carta, consigue hacer que me relaje.

Tras la cena llegamos a un local de los que ellos frecuentan, vamos a la barra a pedir, la verdad es que ellas no han estado nada simpáticas conmigo...las veo hablar y mirarme, resoplo, algo me dice que la noche no va a acabar bien.

La mano de Dani en mi cintura me saca de mis pensamientos y le sonrío algo forzada para que no note que estoy incomoda.

Dani: ¿Quieres algo de beber?

Me sonríe y me da un pico consiguiendo que me relaje un poco, tiene esa capacidad en mí, me tranquiliza, me hace olvidar de todo con tan sólo un beso o cuando me tiene entre sus brazos.

Anna: No...no me apetece beber nada cariño...

Me quedo abrazada a él para estar más tranquila, Dani no me suelta pero no dejo de notar las miradas de ellas sobre mí. Le digo a Dani que voy al baño pero voy fuera a fumar, lo necesito...me enciendo el cigarro, doy una calada y tocan dos veces mi hombro.

CAPÍTULO 24: ¿Me odias o me amas?

Domingo. Siete y media de la tarde. Aeropuerto de Barcelona y con unas ganas enormes de llegar a Madrid por primera vez en mucho tiempo por no decir la primera. Necesito verlo ya, en cuanto llegue pienso ir a su casa porque necesito sus besos, sus abrazos... creo que nunca he necesito tanto ver a alguien, pero es que con él todo es diferente... necesito ver esa sonrisa de medio lado traviesa, que demuestra que es un canalla pero que me encanta que lo sea... mi canalla.

Me monto en el avión imaginándome todo lo que me queda por delante a su lado, sonrío automáticamente y cuando me quiero dar cuenta las azafatas anuncian que ya vamos a aterrizar, por fin...
Bajo del avión con mi maleta en mano, ando distraída hacia la salida, deseando salir y coger un taxi que me lleve a su lado, rebusco en el bolso mi móvil y me choco con alguien. Levanto la vista para pedir perdón, pero me encuentro con una sonrisa que me hace temblar, con unos ojos en los que me pierdo, mi pulso se comienza a acelerar y mi corazón va a mil, una sonrisa comienza a ampliarse en mi cara y acabo pegando un grito abrazándolo fuerte dejando la maleta a un lado riendo levemente feliz.
Me rodea la cintura con sus brazos y me levanta ligeramente del suelo mientras se ríe y llena mi mejilla a besos.

Dani: Al fin mía... -me susurra antes de dejarme en el suelo-.

Anna: Al fin tuya... -sonrío ampliamente mirando sus labios y sus ojos repetidamente mientras me voy acercando poco a poco pero cuando lo voy a besar pongo mi mano en sus labios- aquí no... -le susurro a mm de sus labios y le beso en la comisura tiernamente- no sabes las ganas que tengo de besarte... vámonos...

Dani: Que mala eres... me has dejado con la miel en los labios...

Me coge la maleta y rodea mis hombros, me deja un beso en la cabeza y vamos andando hacia la salida. Mete mi maleta en el maletero y nos montamos en su coche.

Dani: ¿Me vas a besar ya o tengo que sufrir mucho más? -me dice sonriendo como me vuelve loca-

Me acerco lo suficiente hasta sentir su respiración, rozo su nariz, cierro los ojos y rozo sus labios con los míos, pongo una de mis manos en su mejilla y noto como sonríe cuando termino de juntar nuestros labios haciendo que yo también lo haga y le sigo besando igual de dulce, su mano envuelve mi cintura, me pega a él y hace el beso suyo, entreabre nuestras bocas y juega suavemente con mi lengua, terminamos con un suave pico.

Dani: ¿A mi casa...?

Anna: A tu casa... -sonrío asintiéndole- me tienes que dar muchos mimos que estoy sensiblona -digo mientras le pongo cara de pena, sonríe, como me pierde esa sonrisa, me hace una caricia en la cara y arranca.

Dani: Te voy a cuidar como nadie mi niña, para que estés segura de que has elegido bien.

Sonrío como una imbécil y pongo mi mano en su muslo mientras conduce.

Anna: De eso no tengo ninguna duda mi amor... -digo sin darme cuenta y le doy un beso en la mejilla mientras conduce-

Noto que sonríe ampliamente, me mira divertido y vuelve a mirar la carretera.

Dani: ¿Cómo me has llamado?

Anna: ¿Eh...? -mierda lo ha oído, es inútil negarlo- mi amor... -digo tímida-

Dani: Me encanta como suena de tus labios y dirigido a mí... mi amor...

Sonrío feliz de que le guste tanto.

Anna: Pues te vas a cansar de oírlo, mi amor... -digo ahora queriendo- cariño, mi vida...

Dani: No me voy a cansar, porque cuanto más dices más quiero... -pone una mano en mi muslo- me muero de ganas por ir contigo de la mano, por besarte, por tenerte en mis brazos...

Anna: -entrelazo nuestras manos y nuestros dedos y juego con ellos- y yo también... no me quiero separar de ti nunca más, siento lo de todos estos meses...

Dani: Eh princesa... no hay nada que sentir... has despejado las dudas que tenías, ha pasado cuando ha tenido que pasar mi amor...

Anna: -sonrío ampliamente al llamarme así también y le doy un beso en la mano- Te quiero.

Llegamos a su casa y me baja la maleta, ¿quiere que me quede aquí? Me muerdo el labio sonriendo ilusionada. Cierra el maletero y mi mirada sigue fija en la maleta, noto que me mira y subo la mirada a sus ojos.

Dani: Te quedas, ¿no? Al menos esta noche... te necesito, necesito cuidarte Anna...

Asiento con la cabeza sonriendo ampliamente y voy hasta él rodeándole el cuello y dándole besos seguidos en los labios como respuesta.

Dani: ¿Eso es un sí? -me pregunta sonriendo-

Anna: Es un por supuesto... -sonrío de nuevo y le doy otro beso, me aprieta contra él besándome hasta que creemos oportuno subir ya a su casa-

Me encanta la casa de Dani, desde siempre, y me encanta estar aquí como novia, eso sí que es nuevo, lo miro todo y él lleva la maleta a su habitación.
Cuando sale estoy mirando las películas que tiene al lado del mueble de la televisión.

Dani: ¿Pero qué hace abuela? -escucho como se ríe-

Anna: Me las he visto todas... -digo mirando aún- pero no tienes ninguna de miedo, yo que quería ver una contigo... -me doy la vuelta riendo- que a mi chico le dan las películas de miedo... -se acerca a mí, me rodea la cintura y me da besos en la frente riendo-

Dani: Cariño, TU chico -resalta el ''tu'' y eso me encanta- no va a ver una película de miedo en su vida, pero de estas elige la que quieras -coge mi cara con sus manos y me besa- y dúchate o cámbiate si quieres.

Anna: Perdona, ¿pero me estás diciendo que huelo mal o algo? -digo riendo divertida y dándole un empujón jugando-

Se ríe a carcajadas, me coge y me carga a su hombro, yo me río, grito y pataleo a la vez mientras nos lleva hacia el baño.

Anna: DANI NO -me río sin parar-  ¿DÓNDE VAS? ¡BÁJAMEEEEEE!

Dani: Ya que hueles mal... vamos a darte una ducha Simon...

Anna: ¡Te matooooooooooo! ¡¡¡Quita!!! ¡¡Por favor!! -digo demasiado tarde cuando ya me ha metido en su bañera y ha abierto la ducha cayéndome agua por todo mi cuerpo- ¡TE ODIO DANIEL!

Sonríe seductor, sensual, canalla, travieso... se quita la camiseta y luego los pantalones, me mira fijamente.

Dani: No Simon... cuando acabe contigo vas a gritar que me amas.

¿Ha querido decir lo que ha querido decir? Trago saliva nerviosa cuando veo que se mete también en la ducha desnudo, poco a poco el agua va tapando su cuerpo lo cual agradezco porque me estaba volviendo demasiad loca. Sus manos van a mi cintura, me empuja contra la pared y cuando me tiene ahí acorralada bajo el chorro del agua me besa apasionadamente, me abandono en el beso y cuando me quiero dar cuenta ya estoy sin ropa al igual que a él.
Sus besos, sus caricias, sus te quiero mientras me hace el amor en la bañera hace que llegue a lo más alto en a penas unos minutos, sintiendo como pocas veces he sentido y las veces que lo he sentido han sido con él...

Nos duchamos el uno al otro, nos liamos en las toallas y mientras me desenredo el pelo rodea mi cintura y da besos por mi hombro y mi cuello.

Dani: Bueno, ¿qué? -levanto la vista y nos veo a través del espejo- ¿me odias o me amas?

Me sale una sonrisa delatadora en la cara mientras lo miro por el espejo.

Anna: Te amo... ya lo sabes... y ahora más que nunca.

CAPÍTULO 23: Duele sonreír.

Se da por hecho que la persona que deja a otra no lo pasa mal, que es lo que quiere y que no tiene derecho a llorar... que es la parte fácil y no hay nada más lejos de la realidad.

Duele decirle a alguien que quiere estar contigo que ya no quieres estar con él, que a pesar de que no ha hecho nada malo no es la persona que deseas a tu lado, que por mucho que se empeñe, no es lo que quieres... por muy a gusto que estés, no deja de ser solo eso, comodidad...

Duele decir ''no es por ti, es por mí'' y lo tome como un cliché cuando es lo que realmente ocurre. Duele no tener una respuesta o no querer decir la verdad del todo cuando esa persona te pregunta ''¿por qué?'' ''dime que he hecho mal'' y saber que no ha hecho nada, sino todo lo contrario... Duele ver como la persona que te ha estado haciendo feliz un cierto periodo de tiempo le caen lágrimas por tu culpa, porque no te has dado cuenta de la realidad antes, porque la venda que tenías en los ojos no habías podido o no habías querido quitártela hasta ahora...
Que tus brazos son los que necesita pero que no quiere que se los des, que te caigan un par de lágrimas porque te importa aunque no sea de la manera que querría y que con una mirada llena de odio y rencor te diga ''no llores, no tienes derecho a llorar, es lo que tú querías''. Y solo poder callar... callar porque no te sientes con derecho a rebatirle nada porque sabes que lo que digas de nada le va a servir.

Y nada más cruzas la puerta lloras, lloras por haberle hecho daño, pero también lloras porque por otra parte te sientes feliz de ya poder estar con él, con Dani, con mi amor... y te sientes culpable, culpable de que tu felicidad pase por encima de la de otro. Y a esto es lo que se le llama egoísmo, sí, aunque tus sentimientos no los controles, es imposible, porque el amor no llega llamando a la puerta, el amor llega como un huracán arrasándolo todo.

Lo único que necesito ahora es que alguien me consuele, aunque no lo merezca pero necesito sus brazos, sus besos, sus ''todo va a ir bien'' pero aquí ahora mismo no lo tengo, no tengo a nadie porque tampoco puedo ir a mi madre y contarle todo lo ocurrido...
La única persona que me puede calmar está a kilómetros de aquí, esa persona por la que he puesta mi vida patas arriba... y lo siento con toda mi alma pero le necesito, y sé que a él no me voy a conformar con verle dos o tres días a la semana... no lo voy a soportar. De él necesito cada día sus besos, que me rodee con sus brazos, sus ''te amo''... y me siento culpable por sentir esto, pero a la vez feliz porque jamás creí que nunca pudiese amar así... por primera vez siento que este no es mi lugar... sino que mi lugar está junto a él.

Llego a mi casa hecha polvo pero por otra parte deseando de que sea mañana por la tarde para llegar a Madrid y besarle sin que nada ni nadie se interponga. Me doy un baño en el que no puedo reprimir mis lágrimas de nuevo, me pongo mi querido pijama y me tumbo en el sofá, móvil en mano y dispuesta a llamar a Dani, necesito escuchar al menos su voz...
Cada segundo entre tono y tono me parece una eternidad, pero al tercero lo coge y con tan solo escuchar su voz diciendo: ''Preciosa...'' mi cuerpo ya se calma y en mi cara sale una sonrisa que no se borra en toda la conversación.
Se lo cuento todo, él me escucha y me calma como sólo él podría hacerlo, y consigue que todavía le eche más de menos, consigue que reafirme en mi decisión. Antes de colgar, su ''te quiero'' me confirma que el final del camino que he zanjado hoy, tan solo es el principio de uno nuevo, y que él será la persona que estará a mi lado.

Y así, con ese pensamiento y tras cenar algo rápido decido irme a la cama, acurrucándome entre las sábanas, deseando abrazarlo, besarle, no separarme de él y dispuesta a soñar con él, con nosotros, toda la noche.

CAPÍTULO 22: Confío en ti.

Cuelgo el móvil cuando termino de hablar, se que se ha quedado un poco desconcertado, me ha preguntado que de qué y por qué pero sólo le he dicho que cuando nos veamos lo sabrá.
Miro a Dani esperando una reacción, por mínima que sea...
Acaricia mi cara, colocándome un mechón de pelo tras la oreja y esboza una pequeña sonrisa.
Dani: Estamos juntos en esto mi niña...de verdad y ójala pudiese pasar ese trago contigo.
Suspiro algo más tranquila y no puedo decir nada, nada más que abrazarlo escondiéndome en su cuello.
Anna: Gracias por confiar en mí después de todo lo que te he hecho pasar...
Me aprieta contra él, dejándome besos en la frente y el pelo, me siento tranquila y protegida en sus brazos. Al rato hace que le mire y coge mi cara entre sus manos
Dani: Anna...no soportaria besarte y pasar una día de besos y mimos para perderte de nuevo.. confío en ti pero no va a pasar nada de nada hasta que dejes a Lucho, espero que lo entiendas.
Le asiento con los ojos empañados, no soporto la idea de hacerle daño a ambos.
Anna: Lo sé, y esta vez te aseguro que no me vas a perder porque me he dado cuenta de que si no estás a mi lado, si desapareces me muero Dani, me muero... sólo pensar que he estado a punto de echarte de mi vida...
Acerca sus labios a mi frente y los deja ahí apoyados,  al notar su  tacto me calmo, sentirle estabiliza mi cuerpo y mis emociones.
Dani: Yo si que no soportaría perderte Anna...después de besarte, de sentir tanto contigo...no puedo conformarme con ninguna otra, ya no...
Anna: -Lo miro y acaricio su barbita, sonrío- Ni lo hagas...porque te toca otra y me muero.
Consigo que se ría levemente al igual que yo por primera vez en mucho tiempo y me vuelve a abrazar dejándome besos en la mejilla.
Dani: En cuanto se lo digas le llamas ¿vale? Sé que vas a estar mal...
Asiento apretándome más contra él, sé que va a ser un trago muy amargo...uno de los más amargos de mi vida.
Dani: ¿Vendrás a Madrid pronto? ¿O me vas a castigar sin ti cuando ya pueda tenerte?
Provoca que me ría, me separo para mirarle, me pierdo en au mirada, si supiese lo que necesito sus labios...
Anna: El lunes me tienes allí... no me voy a castigar más sin ti...
Le sonrío, miro sus labios pero inmediatamente lo miro a los ojos para que no se de cuenta.
Tarde, veo como sonríe, esa sonrisa traviesa de medio lado que me dice que se ha dado cuenta, algo me dice que en estas cosas me saca ventaja, al fin y al cabo siempre ha sido un seductor y le ha encantado eso de ligar, de conquistar...
Anna: ¿De qué sonríes Martínez? -digo empujandole un poco vergonzosa-
Dani: Que no te puedes resistir a mí, reconócelo...
Se ríe, ya está el Dani sobrado y tengo que decir que lo he echado de menos.
Anna: Puedo resistirme perfectamente -Miento, pero él no tiene por qué saberlo-
Dani: ¿Ah si.. ?
Sonríe, coge mi cara con sus manos y se acerca a mis labios. El corazón me va a mil, se me ha olvidado como se respira, la garganta se me seca, cierro los ojos sintiendo sus labios sin tocarlos y....noto que se aparta, abro losnojos y ahí está con au sonrisa
Dani: Ay Simon, Simon... que dices que te resistes a mí y a la mínima ya te dejas besar ¿eh?.
Anna: Pero que imbécil eres tío -Me hago la enfadada- Yo no me dejo besar sólo que me había entrado algo y he cerrado los ojos
Se ríe a carcajadas.
Dani: Sí, sí, ya... que soy irresistible... reconócelo...
Lo miro y sin poder evitarlo empiezo a reírme, me encanta lo canalla que es.
Anna: El día que vaya a Madrid vamos a ver quién no puede resistirse a quién Martínez...-Bromeo-.
Pasamos la mañana con bromas, risas, salimos a dar una vuelta, la verdad es que lo necesitaba al menos como amigo, lo echaba de menos.
A la hora de irme me acompaña de nuevo al hotel para recoger mi maleta donde ya me están esperando los demás.
Nos damos un abrazo en mi habitación, peganos nuestras frentes y sube mis manos enlazadas con las suyas hasta sus labios, besándola.
Dani: Voy a estar pegado al teléfono esperando esa llamada.
Le asiento sin dejar de entrelazar nuestras manos.
Anna: Gracias por todo... gracias por confiar una vez más en mí y en esperarme...
Dani: No me las... porque estar contigo es lo que hace que yo sea feliz...
Roza nuestras narices, y yo sonrío, bajo la mirada a sus labios, creo que hace lo mismo porque noto que ambos tragamos saliba .
Subimos la mirada un par de veces a nuestros ojos y los volvemos a bajar a nuestros labios mientras poco a poco vamos recortando la distancia que nos separa.
Cierro los ojos y noto como sus labios acariciando suavemente mi labio inferior, despierta infinidad de emociones en mi, llevo una mano a su mejilla y muevo mis labios devolviendole el beso y entre abriendo ligeramente nuestras bocas a la ver que él, agarrándome por la cintura me pega a él.
Sonrío en el beso y hago que el también lo haga, seguimos unos minutos el beso de forma dulce hasta que nos vamos separando poco a poco terminándolo con un pico.
Dani: Te quiero... ¿lo sabes no?.
Anna: -Sonrío ampliamente y asiento- Pero necesitaba oírlo...yo también te quiero Dani, mucho.
Me sonríe y me vuelve a abrazar al igual que yo a el, me deja un beso en el cuello que hace que me recorra un escalofrío.
Definitivamente me muero de ganas por que llegue el lunes y poder ser toda suya y él todo mío... Bajo con los demás y vamos ya a la estación de tren poniendo rumbo a casa, a enfrentarme a Lucho, a poder estar cerca de Dani.

CAPÍTULO 21: Tenemos que hablar.

 

Se está registrando y sonríe hablando con alguno de sus compañeros de Aida y en ese instante me doy cuenta de lo que echo de menos ver esa sonrisa y, que probablemente no pueda ser feliz sin verla cada día de mi vida...

Como si hubiesen congelado la imagen me quedo parada mirándolo un rato hasta que de repente veo que se gira, veo como se le borra la sonrisa al verme allí, le mantengo unos segundos la mirada pero finalmente pierdo y echo a andar hacia el comedor como si no hubiese pasado nada.
Si quiero estar con Dani tengo que demostrárselo, tengo que dejar a Lucho... por Dani, por Lucho, por mí...ellos nos se merecen eso y además va contra mis principios, mi moral... si dejo a Lucho yo creo que Dani entenderá que quiera llevarlo en secreto un tiempo, lo tiene que entender... no lo puedo perder.

Cojo una de las bandejas y comienzo a coger algunas cosas de las que hay para desayunar junto con un café con leche, voy a la mesa donde están mis compañeros y me siento.

Anna: Buenos días -sonrío-

Todos me devuelven el saludo y comenzamos a desayunar mientras hablamos.
Noto como en un momento del desayuno llega alguien a la mesa y apoya una de sus manos en la mesa, recorro el brazo hasta llegar a la cara y veo que es él, trago saliva sin saber qué hacer ni decir.

Dani: No puedes mirarme así e irte sin decir nada -Me susurra- No puedes irte de repente de mi casa y no volver a llamarme... no puedes aparecer y desaparecer así de mi vida porque me matas, ¿lo entiendes?.

Le brilla la mirada, no sé si está enfadado porque me fui o porque no he vuelto a hablarle, quizá por las dos cosas... y tiene razón.

Anna: Tienes razón -Susurro igual que él y me levanto a pesar de que me tiemblan las piernas- Dani tenemos que hablar a solas... yo me voy hoy, pero me quedaré si me aseguras que en algún momento de hoy o mañana hablarás conmigo en un momento que tengas libre...

Me disculpo de mis compañeros y lo empujo un poco para alejarnos de la mesa donde estábamos.

Dani: A la tarde no puedo, tengo la premier.... y ahora me están esperando para repartir las habitaciones...

Anna: Ah bueno pues... -digo un poco desilusionada y con la intención de irme-

Dani: Si me esperas en media hora en recepción hablamos.

Sonrío ya algo más esperanzada aunque su tono sigue siendo algo distante, también hay una chispa de ilusión por que hablemos, se lo veo en la mirada.

Anna: No pienso faltar -Le sonrío-

Dani se va y yo vuelvo a mi sitio, con el estómago totalmente cerrado, pensando en hablar con Lucho antes de volverle a pedir a Dani una oportunidad.

Me termino el café pero no el desayuno, estoy nerviosa, nos levantamos y me disculpo diciendo que no me encuentro muy bien y que me quedo aunque sea un rato mientras ellos dan una vuelta.
Subo a la habitación, me lavo los dientes y me vuelvo a dar un toque en el pelo, a la media hora bajo a esperarlo.

Cuando llego él ya está, puntual como siempre, pasea nervioso por recepción, al levantar la cabeza y verme para en seco, voy hacia él.

Anna: Deberíamos hablar en un sitio más privado

Dani: ¿Dónde?

Anna: Mi... ¿Mi habitación...? -digo no muy segura y nerviosa-

Dani: vamos...

Me pone la mano en mi cadera para que dé la vuelta hacia los ascensores y a mí se me eriza la piel sólo de notar su contacto, trago saliva mientras vamos hacia ellos.

Entramos dentro del ascensor y permanecemos el trayecto en silencio, noto su aroma...huele genial, me derrite su olor.

Llegamos a mi habitación, abro y le indico que pase, lo hace y se sienta en la cama.

Anna: Dani sé que...que no he sido justa, y que no he hecho las cosas bien...-Digo tras cerrar y andando hacia él-  pero si algo tengo claro es que te quiero.

Dani: No se puede querer a dos personas a la vez Anna...yo te quiero a ti y solo a ti, te pido lo mismo.
Me siento a su lado sin apartarle la mirada.

Anna: Me he dado cuenta de que sólo te quiero a ti Dani... dame otra oportunidad por favor...

Dani: Anna... no te puedo dar otra oportunidad... no podría estar pensando cada vez que estás en Barcelona que estarías con él... besándote, diciéndote cosas bonitas.... haciéndote el amor...

Anna: Dani -Le corto- Si te quiero a ti es que no le quiero a él, y...lo voy a dejar, porque ni tú, ni él ni yo nos merecemos esto... él porque conmigo se ha portado bien, tú porque nadie me ha hecho sentir tantísimo amor ni me ha amado tanto y yo...porque va en contra de mis principios, de mi ética, de mi moral.

Dani: -Suspira- Y ¿cómo sé que esta vez sí lo vas a dejar? porque la otra vez lo creía Anna, estaba seguro... ¿cómo se que pensaras igual cuando lo tengas delante?

Me levanto rápidamente, sé que me sigue con la mirada, vacio mi bolso encima de la mesa buscando el móvil y vuelvo con él en la mano y buscando el contacto de Lucho con rapidez, necesito que me crea...  Mi dedo se para en el nombre de " Lucho".

Dani: ¿Qué vas a hacer?

Anna: No puedo dejarle por teléfono Dani pero...

Dani: ¿Pero?

Antes de que pueda contestar ya está dando toques y más rápido aún me lo coge, no puedo dejar ni que me hable porque sé que me dará pena y no puedo estar con él por eso... sería cruel...

Anna: Lucho... -trago saliva nerviosa- este fin de semana... ¿vas a estar en Barcelona...?

Dani coge mi mano, enlaza nuestros dedos fuerte, dándome seguridad, fuerza...diciéndome en silencio que estamos juntos, aún antes de estarlo, y no tengo dudas, ya no...

Anna: Bien...porque tenemos que hablar...

CAPÍTULO 20: Tiempo.

Todo lo que me dice me deja sin palabras, no se muy bien que decir ahora, todo lo que ha dicho es cierto... me gusta que me vuelva loca, lo único que sigo queriendo es a él y me da miedo, sí, miedo...

Anna: Tienes razón, sí, tienes razón, ¿vale? -digo aún algo alterada pero calmándome un poco-

Su rostro no se relaja, me ha escupido las verdades a la cara y sigue mirándome con cara de enfado, con dureza... esperando a que diga algo, y tengo la sensación de que sabe perfectamente que palabras quiere que salgan de mí.

Dani: Tengo razón y... ¿qué más?

Anna: -suspiro, sigue cabreado, pues nada, como él quiera- ¡¿Pero que te esperas que diga Dani?! ¿Que te quiero? ¡¿Que estoy enamorada hasta los huesos de ti?! ¿Es eso lo que quieres oir? Pues ya está, ya lo has oído, ¡que parece que me quieres humillar!

Dani: ¿Que te quiero humillar Anna? ¿Que te quiero humillar? -ríe irónico, anda hacia la puerta pero en lugar de salir vuelve hasta donde estaba- Soy yo el que está jodidamente enamorado de ti, muriéndome de ganas por estar contigo sabiendo que estás con otro, dime Anna, ¿qué es más humillante?

Suspiro y miro hacia abajo no sabiendo que decir...

Dani: Eso, no digas nada, ¡como siempre cuando no sabes como afrontar algo!

Anna: Es que no se que decir Dani,! joder! ¡¡No lo se!!

Se sienta en el sofá, con la mirada clavada en la tele a pesar de que está apagada, habla sin apartar la mirada de ahí.

Dani: Pues si ya lo has dicho todo, si no vas a hacer nada por cambiar esto... yo no tengo nada más que decir...

Cojo mi bolso cabreada dispuesta a irme pero le miro de nuevo mirando la pantalla apagada y me doy cuenta de que no me quiero ir, de que lo quiero a él y de que no lo puedo ver así.

Suelto de nuevo el bolso y me siento a su lado mirándolo aunque él a mí no.

Anna: ¿Te puedo... te puedo proponer algo...? -digo con algo de temor a que me hable de nuevo cabreado-.

Me mira, sin decir nada, pero al menos parece dispueto a escuchar, y eso me vale, por lo que me decido a hablar.

Anna: Vamos a intentarlo... vamos a estar juntos, dejaré a Lucho… -en su cara se va dibujando una sonrisa que tal vez ahora se borre- pero de momento, en secreto...

Noto como esa sonrisa se borra como esperaba y resopla.

Dani: Anna, no, lo siento pero no puedo… -se levanta de nuevo cabreado-

Anna: ¿Pero por qué no? -me levanto detrás de él- te estoy diciendo que lo voy a dejar dentro de un tiempo... no puedo dejarlo ya... puede ser egoísta pero le haría mucho daño ahora mismo…

Dani: Ah ¿y si lo dejas en un mes no le haces daño Anna? ¿Y yo qué? ¿Tengo que aguantar que pasees con él, que le cojas la mano, qur le beses, que hagáis el amor hasta que te decidas a dejarlo Anna? ¿De verdad me valoras tan poco como para pedirme que aguante eso?

Anna: Esto no es cuestión de valorarte o no Dani, que por supuesto que te valoro, muchísimo, pero las cosas no son siempre fáciles ¿sabes?

Dani: No, no lo son, pero tú lo complicas todo mucho más de lo que ya lo son.

No sé que decir...me da la sensación de que cualquier cosa que diga ahora solo va a provocar otra discusión, y lo que menos deseo ahora es pelear con él. Respiro hondo, trago saliva y me levanto.

Anna: Creo que... -titubeo- que va a ser mejor que me vaya...

Dani: Pues nada, si lo piensas dejar todo así... adiós...

Lo noto dolido y me rompe por dentro pero ahora mismo no puedo hacer otra cosa si él no quiere...

Me voy... salgo de esa casa a pesar de que lo que me apetece es quedarme junto a él en el sofá y llenarnos a besos como aquella semana, aquella increíble semana que cambió mi vida, pero ahora no puedo.

Me voy a la rueda de prensa del hormiguero donde pongo mi mejor sonrisa y hago como la que no me pasa nada, por fuera parece que estoy genial, descansada del verano y los demás lo ven… pero por dentro... por dentro estoy rota y sin saber bien que hacer con mi vida privada.

A pesar de que en el trabajo, familia y amigos me va genial, no puedo evitar sentirme algo vacía, incompleta... porque me falta él...

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La semana siguiente viajo a Vitoria, quizás el cambio de aires y la distancia me siente bien... en un principio iba a ir y volver en el mismo día, luego pensamos  en quedarnos y así ver un poco más del festival.

Presentamos "Por arte de magia" por las calles de Vitoria y tras la rueda de prensa nos vamos a pasar la tarde, cenamos por aquí y pronto cada uno a sus habitaciones.

A la mañana siguiente bajo a desayunar donde ya supongo que estarán los demás pero al pasar por recepción para ir al comedor... no, no puede ser... ¡mierda!

CAPÍTULO 19: Reproches.

Lo veo delante de mí, con rencor en su mirada, hago esfuerzos para que las lágrimas de mis ojos no caigan, odio que me mire así, no lo soporto, me mata por dentro.

Dani: Te estoy esperando Anna, no tengo todo el tiempo del mundo y creo que tu dentro de una hora tienes presentación ¿no?

Me duele como me lo dice pero es que tampoco se que decirle... lo tenía claro viniendo para aquí pero ahora que lo tengo delante... no.
No soporto que me mire así, no soporto que me reproche con la.mirada... empiezo a notar como me enfado y sale de mi boca algo que no querría.

Anna: Que eres un egoísta -habla mi rabia-. Que vas de dolido y eres un egoísta que ni siquiera me has llamado, que has pasado de mí, que me has dejado tirada

Dani: ¿Que yo te he dejado tirada? ¿QUÉ TE HE DEJADO TIRADA YO ANNA? -Me echo un poco para detrás un poco asustada- Has sido tú la que te fuiste con tu novio y no te has dignado ¡ni en escribirme un día para saber como estaba!

Anna: ¿ ESCRIBIRTE YO? ¿TÚ? -Me invade la rabia, no soporto que me hable así- ¿Y tú escribirme para ver cómo estaba yo? ¿qué pasa, qué como no me puedes echar un polvo ya te importa una mierda que es de mi vida, no?

Cambia su cara, ahora si que lo he roto en mil pedazos, lo sé, pero no puedo parar...

Dani: Vete a la mierda Anna, VETE A LA MIERDA -Me grita y pasea de un lado a otro- La egoísta eres tú, que me usaste una semana a tu antojo y luego ME HAS DADO UNA PATADA PARA IRTE CON ESE TÍO.

Resoplo más cabreada aún, bueno entre cabreada y dolida, sé que me estoy pasando pero no me salen otras palabras de mi interior, ambos nos estamos reprochando todo lo de estos meses, dolidos...

Anna: ¿A MI ANTOJO? ¿PERO QUÉ TE CREES QUE SOY EH? -Le doy un pequeño empujón aguantando las lágrimas- ¿¡¡Quién te crees que eres para decirme eso?!! ¡¿Qué pretendías que hiciera?!! ¡Qué tengo novio Dani NOVIO! ¿Qué pasa? Llego a mi casa y digo: hola cariño, que te he estado poniendo los cuernos una semana con Dani, sí, sí, pero como ha sido sólo una semana no pasa nada.

Dani: ¿Quién me creo que eres? UNA TIA QUE DICE QUE ME AMA que está UNA semana acostándose conmigo, diciendo que ME AMA, QUE ESTÁS ENAMORADA DE MÍ y luego vuelve con SU NOVIO como si nada...¿De verdad le quieres Anna? ¿y por eso le haces eso? ERES UNA HIPÓCRITA.

Anna: ¿HIPÓCRITA?! ¡¡¿Pero tú qué sabes si lo quiero o no?!! Si sigo con él quizás sea por algo ¿no crees?! Y en el caso de que no lo quisiera ¡no te tengo que dar explicaciones joder! ¡Que no eres mi novio para explicarte todo lo que he estado haciendo en el verano!

Dani: ¿Lo quieres y te acuestas conmigo? ¿de verdad Anna? ¿¿¡DE VERDAD??!  no, ya sé que no soy TU NOVIO, a mi ya me has dejado claro, CLARISIMO que no quieres nada conmigo, pero ¿sabes por qué no quieres nada? porque eres una COBARDE.

Anna: ¿QUÉ? -tiene razón- No tienes ni idea Dani...NI IDEA.

Dani: ¿Qué no tengo ni idea? ¡¡¿¿En serio crees que no tengo ni idea??!! Te da miedo, MIEDO, a que esto no salga bien y te veas sin el uno y sin el otro, o ¡¿es qué es mentira?! ¡DIME!

Anna: MIENTES -Le grito aunque es cierto - MIENTES MIENTES MIENTES

Le grito empujandole, golpeando su pecho, lo grito alto, a ver si así me lo creo...lágimas caen de mis ojos, le doy otro empujón y me voy la vuelta dispues a salir por la puerta mientraa sigo gitando.

Anna: HA SIDO UN ERROR VENIR, ESA SEMANA FUE UN ERROR Y NO TE QUIERO, NO TE QUIERO.

Cuando voy a abrir la puerta noto que me coge del brazo y me da la vuelta más enfadado aún.

Dani: ¡¡Mírame a los ojos y dime que no me quieres, venga dimelo!! -Me dice sin soltarme del brazo-.

Anna: Me haces daños Dani... -Digo cogiendo su mano que me aprieta con la mía intentando quitarla sin mirarlo a los ojos-.

Dani: No mientas que no te estoy haciendo daño solo que no tienes valor y lo pones de excusa para irte -me alza la cara suave por la barbilla- DÍMELO.

Subo la mirada, soy incapaz de decírselo, me pierdo en sus ojos, me estremezco notando su mano, bajo la mirada.

Anna: No...no te quiero -Titubeo-
 .
Y noto como me suelta, sonríe de forma irónica y se ríe de la misma forma.

Dani: Mentirosa, no eres capaz ni de mirarme a los ojos, eres una cobarde Anna! Reconócelo joder, RECONÓCELO!

Anna: Y tu un egoísta, ¡EGOÍSTA! ¡Qué te crees que sólo existes tú! ¡Y que no voy a hacer daño a nadie cuando no es así!

Dani: Llámame egoísta, llámame loco. Dime que no puedo ser así, que soy idiota, que no me aguantas, que no puedes conmigo. ¡¡Pero admítelo Anna!! ¡Tampoco puedes estar sin mí! Dime que no me soportas, pero dime también que no hay UN PUTO DÍA que no pienses en mí, porque puedo ser gilipollas, caprichoso, celoso, pero te gusta, ¡te gusta que te vuelva loca! Que te quiera sólo para mí. ¡¡Va!! ¡Ten valor y dime que nunca sé lo que quiero! Pero se aún más valiente TÚ, ANNA, se más valiente y reconoce de una vez que lo único que sigues queriendo es a mí!.

CAPÍTULO 18: Ella.

Narrado por Dani.

Madrid. Coches, tráfico, personas que suben del metro, personas que bajan, calles a rebozar, conversaciones de todo tipo. Y aún así... aún así te sientes sólo... como si no hubiese nadie alrededor y las voces las escuchases de fondo, sumergido en tus pensamientos... sumergido en ella... en su olor, en la suavidad de su piel, su sonrisa, en esos ojos azules que brillan, que me hablan... en esos tres lunares perfectamente alineados en su cuello, en como se le eriza la piel cuando le rozo con la mano... ella.

La he intentado olvidar, juro que lo he intentado... pero el móvil, el whatsapp y todas las redes sociales son muy tentadoras y han hecho que esté cada día, cada hora, mirando su última conexión, su Twitter, todo... incluso alguna vez hemos coincidido en ese maldito "En línea" y me he desconectado rápidamente... y cada vez que miraba sus perfiles me arrepentía enormemente... fotos de sus vacaciones, de su sobrina, del parque de atracciones, de la playa... ni por su cumpleaños la he felicitado, el primero desde que la conozco... parece feliz y eso hacía que no le escribiese, no soy nadie para estropear nada...

Sé que está con él, he visto las fotos de los dos, no aparecen juntos pero los lugares coinciden... parece que ya ha elegido, y no he tenido la suerte de ganar el premio gordo, la mujer perfecta...

Es irónico, siempre digo que prefiero a las morenas, pero aparece ella, una rubia...y cualquier otra mujer en el mundo deja de interesarme...

Puede que sea la primera vez que me pasa esto pero estoy deseando que comience la rutina de una puta vez... estar distraído, no estar todo el día pensando en ella y que cuando me dispongo a salir a correr o simplemente a comprar me tenga que quedar 10 minutos mirando cada cartel de "El Corte Inglés" que aparecen por cada esquina con ella en sus spots tan perfecta como siempre... Cada vez que veo uno de esos carteles, en el primer segundo sonrío... mi rubia, está triunfando, luego recuerdo que la he tenido, y que ya no la tengo, que me ha roto en mil pedazos al elegir a otro, que ahora después de haber estado una semana con ella... me siento incapaz de estar con cualquier otra...

Intento distraerme, salgo con amigos, con Meri y mi hermano... voy a hacer una TC y todo el mundo me pide que lleve a Anna... A Anna y a Flo... lo llamo pero como me esperaba está de vacaciones, a Anna ni se me pasa por la cabeza avisarla y al final se lo digo a Raúl, por lo menos me sacará unas risas que las necesito bastante...

El día de la TC, desde primera hora de la mañana me están enviando preguntas, la gran mayoría quiere saber si mantengo contacto con Anna... supongo que algo tendré que decir... pero es que nadie se hace a la idea de lo que me cuesta y me duele nombrarla...

Me turran diciéndome que la llame, intento pasar como si no las leyese pero al final acabo diciendo que nunca me lo coge en las TC, cosa que es verdad, y que estará ocupada. Otras que si hablo aún con Anna y no se como pero me sale decir que sí y que el otro día me escribió para algo que ellos no podían saber, cuando me dijo que venía a Madrid... 

Abro los ojos como platos cuando me preguntan que si amo a Anna y contesto rápido con varios "si, claro..." y no saben cuanto... no se hacen ni una idea...

No saben que les acabo de confesar a todos con esas dos palabras que estoy enamoradísimo de Anna, que sí, que tenían razón con lo de nuestras miradas, nuestras indirectas... en todo, al menos por mi parte, parece que por la de ella no...

Soy imbécil, un iluso... siempre he sabido que Anna esta a más nivel que yo, que nunca podría estar con ella... lo tenía asumido, hasta que volvimos a vernos y me hice ilusiones viendo que tonteaba conmigo...

También digo que Anna es muy clara en las cosas de estar con alguien y ahora lo digo por experiencia... hay veces que me arrepiento de haber cedido a ese pacto que me ha hecho adicto a ella pero después recuerdo todo lo que vivimos y se que lo repetiría una y mil veces más... porque me conformo con haber vivido nuesta historia, nuestro cuento, aunque solo haya durado una semana, aunque tuviese un final... quizás gracias a eso he aprendido a disfrutar cada segundo de ella... a quedarme despierto gran parte de la noche viendo como dormía a mi lado, valorar esos pequeños detalles que normalmente la gente pasa por alto...

Hoy me ha escrito, dice que viene a Madrid por El Hormiguero y varias cosas más y que quiere hablar... al ver su nombre en la pantalla de mi móvil he sentido un pinchazo en el corazón... yo no puedo ser su amigo ahora, no me sale...

Se que le he hecho daño y que quizás me he pasado al decirle que no quería verla pero más daño y más trabajo me ha costado a mi escribírselo... se que habrá comenzado a llorar pero no puedo hacer otra cosa, no quiero sufrir más...

Yo nunca me había querido enamorar..

si que he querido a chicas, a Cris sin ir más lejos, pero era diferente, sabía que me la camelaba como quería, que yo controlaba la situacion... con Anna es diferente, con ella no controlo nada, y eso me pone nervioso... Tiene su vida ordenada al 100% y sobre todo tiene claro lo que quiere en todos los sentidos, no sabes por donde te va a salir en cada momento, lo mismo saca su sentido del humor, que es lo que hace normalmente, o te habla seria... y eso hace que guste aún más...

Es perfecta... una combinación perfecta de responsabilidad y locura, de dulzura y sensualidad, de payasa y de inteligente, de buen humor y carácter... algo que sería contradictorio en otras personas en ella convive perfecfamente convirtiéndola en la mujer más especial del mundo.

Llaman al timbre y mis pulsaciones van a mil, rezo para que no sea ella, mis pintas no son ni medio normales, bóxers, camiseta básica blanca, despeinado, sin arreglarme mucho la barba de tres días... aspecto cansado de la vida...

Y como no podía ser de otra forma al preguntar quien es me responde su voz con un "Soy Anna" algo temerosa, suspiro y tras varios segundos abro...

Sube, y la espero en la puerta, está preciosa, a pesar de que eso no sea una novedad me sigue dejando sin aliento...

viene dispuesta a hablar y sin que yo se lo diga pasa, la sigo hasta el salón, me mira... y mis ojos se clavan en sus ojazos azules, saco fuerzas para ser duro con ella.

Dani: Dí lo que tengas que decir y vete...

Se lo digo a ella, a la única que con una frase puede hundirme en la más grande de las miserias o hacer que me sienta capaz de comerme el mundo.