CAPÍTULO 7: Luna llena.

Estamos un rato más en la playa pero sin hablarnos uno al otro, me tendría que haber callado, estábamos genial…

Cuando empieza a irse el sol decidimos irnos ya al hotel para ducharnos y descansar un poco, quedamos para cenar en el restaurante del hotel esta noche, ya que aún no conocemos muy bien la zona.

Me doy una ducha larga, la playa siempre me ha agotado. Me coloco bajo el chorro de agua dejando que cada gota caiga por mi cuerpo pensando… si, en Dani, en que estamos genial y al segundo algo pasa que lo tuerce todo y me afecta, claro que me afecta, me duele, porque Dani es importante para mí, muy importante, Dani es…

El sonido de mi móvil me saca de mi introspección, supongo que será Lucho, cierro el agua, me lio la toalla y corro al teléfono. Me seco las manos y descuelgo.

Anna: ¿Si?

Lucho: ¡Mi niña! ¿qué tal?

Anna: Cielo…-sonrío- muy bien, saliendo de la ducha me has pillado, que vamos a cenar ahora.

Lucho: Uhmm…saliendo de la ducha, ¿eh? Si es que soy muy oportuno-Dice en un tono pícaro-

Anna: Sí –No me apetece entrar en ese juego ahora- ¿qué tal tú? ¿vas a salir?

Lucho: Pues no lo sé… si estuvieras aquí saliendo de mi ducha ya te digo yo a ti que no…-Me dice siguiendo con lo de antes-

Anna: Pero no estoy…-Quiero pararlo- Sal un rato y te despejas de tanto trabajo…

Hablamos un rato más, sigue dejando caer algo para jugar pero consigo evitarlo bastante bien sin que se moleste. Colgamos y me quedo mirando el móvil como si me fuese a dar la respuesta…pero no lo hace, así que me levanto y me pongo uno de los vestidos que he traído, sandalias y me maquillo un poco.

Miro el reloj cuando termino de prepararme, por una vez he terminado antes de tiempo, voy a la terraza y me apoyo en la barandilla mirando hacia la playa, respiro hondo la brisa que corre y que juega con mi pelo, cierro los ojos sintiéndola y mi cabeza se vuelve a activar, va saltando de Lucho a Dani pero no entiendo a dónde quiere llegar, abro los ojos queriendo escapar de esos pensamientos que me crean angustia y le veo…sentado en la cama atándose sus inseparables convers y automáticamente mis labios se curvan creando una sonrisa.

Hoy lo veo especialmente guapo y eso que estoy acostumbrada a verlo y no lleva nada que no haya visto ya…una camisa, los vaqueros y sus convers… no sé si es por la playa pero le veo diferente. Cuando veo que se levanta me giro y entro en la habitación, cojo mis cosas y voy bajando donde ya hay unos cuantos del equipo.

Esperamos charlando a que vayan bajando, yo estoy pendiente de que baje Dani, lo oigo acercarse bromeando con Raúl y no sé por qué pero mi cuerpo se tensa, expectante… no sé cómo estaremos ahora, llegan dónde estamos y le sonrío. Siento alivio al ver que me devuelve la sonrisa y me guiña un ojo, noto que se va a acercar a decirme algo pero lo corta Raúl.

Raúl: Pero qué guapa Annita, cualquiera diría que tienes novio –Me achucha y le correspondo riendo levemente-.

Miro a Dani mientras Raúl me achucha y veo que su cara ha vuelto a cambiar…lo hace siempre que la sombra de Lucho planea por aquí, y no sé por qué a mí también me molesta que lo nombren delante de él.

Echamos a andar hacia el restaurante y me aseguro de sentarme al lado de Dani, le sonrío al hacerlo y él me devuelve la sonrisa.

Dani: Estás muy guapa…-Lo noto nervioso y que me lo dice tímido, me río levemente- No te rías…que no soy de decir estas cosas…-Me dice riendo él también-.

Anna: Si es que no estoy acostumbrada a verte tan tímido…-sonrío divertida mirando la carta-.

Me sonríe y se pone también a ojear su carta, lo miro de reojo, de cerca aún está más guapo, además huele increíblemente bien…me dan ganas de acercarme a él y oler su cuello, pero eso es algo que no sería nada apropiado.

La cena pasa con risas y bromas entre todos, aunque constantemente estoy controlando una especie de impulso que tengo de abrazar a Dani, hacerle una caricia, de sentirle cerca.

Respiro hondo, me tengo que controlar, no sé muy bien que me pasa, él a veces también me mira sonriendo, nos entendemos con la mirada, tenemos ganas de abrazarnos ambos, cada vez que pasa eso agacho la mirada sonriendo tímida…pero es que hay otras veces que tontea con Marta y me lío. Su mirada me dice una cosa, lo mismo que se crea entre nosotros cada vez que estamos cerca, pero luego Marta le dice algo y entra al trapo…supongo que no soy la más indicada para hablar, es más, debería olvidar todo esto… yo estoy con Lucho.

Le echo la culpa a la luna llena, ¿no dicen que cuando hay luna llena desequilibra el agua y a las personas? pues seguro que es eso, la fuerza de la luna.

Terminamos de cenar, nos levantamos, tomamos algo en el pub de al lado del hotel. A las dos decidimos subir a nuestras respectivas habitaciones, me pongo el pijama de verano y cogiendo mi libro, me siento en la terraza en una de las sillas a modo indio y abro el libro.

No me centro en la historia y mucho menos cuando veo que la luz de la habitación de Dani se enciende, lo oigo hablar y sin poder resistirlo me levanto para escuchar mejor, habla con…con Marta, parece que ella le propone irse los dos solos y él se excusa diciendo que está agotado del día. Vuelvo a sentarme como antes y a agachar la mirada al libro rápidamente cuando escucho la puerta de la habitación y veo la sombra en las cortinas. Al rato escucho la puerta de la terraza, me pongo nerviosa y disimulo intentando parecer concentrada en el libro.

Dani: Tengo las mejores vistas de todo el hotel.

Anna: -Sonrío y levanto la vista- Eres un exagerado.

Dani: ¿Exagerado?-Se ríe levemente sentándose en una de las sillas de su terraza- Hay una tía rubia delante de mí ahora mismo que está muy bien…

Se ríe, yo bajo las piernas por precaución ya que llevo shorts. Mira hacia arriba, sonríe, lo miro atentamente, sé que va a decirme algo, me mira.

Dani: Hay una luna preciosa y nosotros aquí pudiendo disfrutarla desde la paya, ¿te vienes?

Sonrío y me muerdo el labio inferior pensándomelo…me apetece mucho, muchísimo y quizá esa sea la mejor razón para no ir, pero por otro lado…playa, noche, brisa, luna llena y junto a él es algo demasiado tentador.

Anna: ¿Ahora?¿no es muy tarde ya?-Digo cerrando el libro y mirando la hora del móvil-

Dani: Venga ya…no me seas abuela –Se ríe y se levanta- te espero abajo en cinco minutos.

Y se va dejándome ahí, no sabiendo que hacer, suspiro y me río yo sola nerviosa, me levanto yendo hacia dentro, cierro la terraza junto con las cortinas y me cambio para bajar. Está al pie de la escalera y sonríe al verme, me atrae hacia él cuando términos de bajar.

Dani: Sabía que vendrías pequeña... -Me susurra en el abrazo-.

Me separo dispuesta a decirle que es un creído, pero me pierdo en sus ojos verdes y sonrío igual que él. Andamos hacia la playa, nos descalzamos y paseamos por la orilla dejando que las olas nos mojen los pies.

Una ola más grande de lo normal me moja por encima de las rodillas y hace que chille saltando un poco, lo que hace que Dani se ría a carcajadas y acabo yo también riendo. Me achucha rodeando mis hombros, me besa el pelo y andamos así un rato más hasta que me coge de la mano apartándome de la orilla e indicándome que nos sentemos en la arena, me siento junto a él, miramos al mar y sin pretenderlo a la vez nos miramos.

Anna: Echaba de menos esto…te echaba de menos a ti...

Dani: Yo a ti también Anna…-Me lo dice serio y mirándome a los ojos lo que hace que sea sincero- No me gusta que estemos tan distantes…

Anna: A mí tampoco…si me faltas no me siento bien.

Sigue mirándome, me aparta un mechón que la brisa me ha movido y me lo coloca tras la oreja, sonrío nerviosa, él también, sin darnos cuenta estamos cerca….mis ojos miran sus labios, los suyos los míos, noto como nos vamos acercando sin darnos cuenta, nuestros ojos siguen saltando de nuestros ojos a nuestros labios…trago saliva, me debería separar…estoy pasando el límite.