CAPÍTULO 16: ¿Y ahora qué?.

Anna: Na.nada... sólo que te he echado mucho de menos...

Digo abrazándolo aún, me lo pienso varios segundos pero al final opto por darle esa respuesta, creo que es lo mejor... para todos... por lo menos por ahora...

No quiero tomar deciosiones ahora, más bien no puedo...y en sus brazos me siento cómoda,  le compensaré, le amaré como...como se merece, seré la mejor novia del mundo y la más fiel. Lo aprieto fuerte, muy fuerte, queriendo impregnarme de él y borrar el olor de Dani, subo mi cara, atrapo la suya entre mis manos y lo beso con ganas queriendo eliminar cualquier rastro que quede de él. Él me corresponde al beso algo sorprendido al principio pero al final noto como me sonríe y me besa de la misma forma que yo a él, le susurro varios "te quieros" y nos separamos al cabo de un rato.

Pasamos una tarde entretenida de paseo, de tiendas, tomamos café y se empeña en invitarme a todo, es un cielo, y yo sin embargo no me lo merezco. Miro de vez en cuando el móvil como buscando algo de Dani... pero no hay nada, nada...

A veces hasta me evado de la conversación y sin quererlo me encuentro recordando momentos con Dani o imaginando que estará haciendo ahora... me esfuerzo por echarlo de mi mente, por complacer a quien es mi novio pero cuando Lucho me propone pasar la noche juntos no puedo aceptar.

Anna: Eh...verás... -no sé como negarme- tengo...tengo lío porque... -me mira sin entender- tengo que hacer maletas...

Lucho: ¿Maletas? ¿Como que tienes que hacer maletas Anna? ¿A dónde vas? -me dice confundido y algo enfadado-.

Anna: -Me aclaro la voz para sonar convincente- Tengo...tengo que ir a Madrid, lo siento me lo han dicho antes de verte... -su cara es de no entender- es que quieren que presente los "Neox Fan Awards..."

Me asiente mirando para otro lado y me vuelve a mirar algo más tranquilo pero noto que no del todo.

Lucho: Y supongo que no puedo o no quieres que me vaya contigo claro...

Mi cabeza comienza a ir a mil y mis pulsaciones se disparan, esto no me lo esperaba...y no, no quiero que venga, eso sería demasida intimidad y aún no estoy preparada para eso... intento sonar natural.

Anna: Mi amor...-nunca lo he llamado así, le cojo la mano, necesito que me crea y se quede- Volveré prontísimo seguro y allí te vas a aburrir porque estaré de reunión en reunión cariño...

Noto que suspira y que no se como me cree, me sonríe y me deja un beso en la mano, yo suspiro tranquila.

Anna: te quiero... -me acerco a él y le rodeo el cuello dándole un beso-.

Lo beso un largo rato, y cuando me doy cuenta de que en ese beso me estoy acordando de los de Dani lo paro... se me remueve el estómago.

Anna: No me siento muy bien... -me acaricia la cara preocupado y yo me siento más culpable-.

Lucho: ¿Qué te pasa rubia?

Me encojo de hombros y lo abrazo escondiendo mi cara en su pecho.

Anna: Me noto algo revuelta... no se... ¿vamos a tu casa a dormir juntitos? -digo cediendo al final-.

Lucho: ¿Si? -dice sonriendo y con una cara que conozco-.

Anna: Pero solo dormir...necesito mimos..

Lucho: vaaale -se ríe levemente abrazandome- te daré todos los mimos que quieras cariño -me da un beso en la cabeza sintiéndome aún peor-.

Vamos a su casa, me pongo el pijama que he cogido de paso y nos tumbamos en la cama, me abrazo a él y me hace caricias. 

Inconscientemente comparo sus caricias con las de Dani, y no, no son  lo mismo...empiezp a sentir agobio y rabia, mucha rabia por no saber nada de él... no se merece que lo eche de menos, ni Lucho que lo prive de mi...subo mi cara y lo beso... queriendo poner las cosas en su lugar con ese beso.

Le acabo haciendo el amor, desechando la rabia que siento por Dani, por no llamarme ni hablarme ni un día de todos los que llevamos separados.

Noto que el disfruta pero yo no paro de pensar en Dani...

Probablemente es la vez que más lo he hecho disfrutar, y yo... yo he tenido que fingir que disfrutaba, sumar otra mentira más... al terminar le digo que estoy agitada... volviendo a engañarle, pero esta vez él si que no sospecha nada, aún sigue sorprendido y exhausto, no tarda en dormirse, yo en cambio, paso la noche en vela, con remordimientos, con angustia...

Doy mil vueltas en la cama, miro el reloj una y otra vez y la última vez que lo miro son las 6 de mañana quedándome dormida al fin...

Suena el deapertador, me lo puse a las diez... lo paro, Lucho a penas se remueve, está de espaldas a la otra punta de la cama, Dani y yo siempre nos dormíamos y despertábamos abrazados, aunque fuese en diferente postura...¡joder Anna! Dani no está.

Me levanto airosa de la cama reprimiendo abofetearme a mí misma, quiero gritar, llorar, estallar... pero para eso tengo que salir ya de aquí...

Le escribo una nota diciéndole que nos vemos esta tarde o mañana y salgo e inmediatamente después de salir comienzo a llorar, intento secarme las lágrimas pero ella son más rápidas que yo y me encharcan la cara...

Necesito hablar con alguien de esto, alguien que en estos momentos me abrace y me diga que todo va a salir bien...

No se como pero llego a casa de mi hermana, llamo aún llorando, espero varios minutos supongo que estarían durmiendo aún, me ve llorando y sin preguntarme nada me abraza fuerte y yo hago lo mismo llorando más si cabe en su hombro.

Anna: Me he enamorado... creo que me he enamorado hasta las trancas, como nunca... -digo sollozando en su hombro- pero no me quiere, no me quiere...

Sin dejar de abrazarme me lleva hasta el sofá y me acuna en sus brazos como cuando era pequeña y me caía.

Berta: Pero si estáis genial gordi... ¿qué ha pasado? -me dice creyendo que hablo de Lucho-.

Anna: No estamos genial... -sorbo los mocos y me limpio con la mano- No me llama...ha sido una semana...mágica, idílica...

Berta: Cómo una semana cariño... -me acaricia la cara- ¿Qué pasa Anna?

Anna: -Niego con la cabeza limpiándome aún la cara- que no Berta... -sigo llorando- que no hablo de él... que lo he engañado… -digo algo cabrada conmigo misma-.

Berta: ¿Como que lo has engañado? Anna, ¿a quien? -me dice sin entender nada- tranquilízate primero gordi... porque no estoy entiendo nada...

Suspiro y me lleva una rato explicarle todo... y más porque no dejo de llorar. Le cuento que hablo de Dani, de mis pequeñas dudas antes del viaje, de toda la semana, mi sentimiento de culpa ahora pero lo que no puedo evitar sentir... todo.

Anna: Lucho no se merece esto... soy basura Berta... tengo que estar con Lucho, tengo que amarle como a Dani...

Me abraza más fuerte, se que está algo confundida pero me apoya como siempre...

Berta: No digas eso cariño... -me acaricia el pelo- nadie controla sus sentimientos... nadie -me separa y me acaricia la cara- y sí, no está bien lo que has hecho, pero ya está hecho Anna...

Anna: y no lo debería de haber hecho, ¿para que me ha servido? ¿Para desmontar mi vida Berta? -lloro de nuevo- ¡es que pasa de mi! No me habla, ni me llama, nada... -lloro más- creía que me quería... todo lo que me decía, todo lo que me hacia sentir con una simple caricia... creía que era porque el también me quería…

Berta: ¿Y tú...? ¿Has probado a decirle algo mi niña? Eres tú quien ha venido a Mollet donde tienes a alguien, no él... eres tú quien tiene que tomar una decisión, no él… -me acaricia la cara-.

Anna: Ya... pero... si el tampoco me ha hablado es porque no le importo tanto como creía... 

Me niega con la cabeza.

Berta: Te aseguro que le importas, que le importas mucho... sólo hay que ver como te miraba y las cosas que me contabas... estará dolido, es normal Anna...

No habia pensado en como se sentiría él, en su manera de vivir las cosas... miro a mi hermana que acaba de abrirme los ojos, mis ojos se secan... ¿aún hay esperanza o... es tarde?.

Escucho a mis sobrinos bajar chichando al saber que estoy aquí y me limpio rápidamente las lágrimas.

Nuria y Gonzalo: ¡Tataaaaa! -me abrazan, me termino de secar la cara, sonrío y los abrazo también fuerte-.

Anna: Hola mis vida... -digo sorbiendo los mocos, les doy besos a cada uno y miro a mi hermana- gracias... -susurro-.

Juego con ellos, consiguen regalarme unas cuantas sonrisas, paso la mañana con ellos y después de comer me voy paseando a mi casa.

Al llegar comienzo a hacer la maleta, poco pendiente de que meto... más pendiente en pensar si escribir a Dani y qué decir.

Me siento en la cama, Iphone en mano, deslizo mis dedos por la pantalla y selecciono su nombre... respiro, ¿y ahora qué?.